“La demanda de ayuda en el Sur no sólo no disminuye sino que cada vez es mayor. Diariamente llegan personas a nuestras oficinas en busca de alguna prestación”, ha confirmado a este periódico José Luis Camisón, coordinador de Cruz Roja en la comarca de Abona. La ONG presentó recientemente el balance de las acciones desarrolladas en 2015 que viene a corroborar que la crisis económica sigue pasando factura a un elevado número de familias en esta zona de la Isla. Las altas tasas de desempleo, especialmente de larga duración, y la ausencia de cobertura que afecta a miles de ciudadanos, dibujan un panorama muy complicado. A lo largo del año pasado Cruz Roja prestó atención social a 3.700 familias en situación de vulnerabilidad en los municipios de Arona, Granadilla, San Miguel, Arico y Vilaflor.

Camisón explicó que el perfil del demandante de ayuda ha ido variando con el paso de los años. “Antes eran mayoritariamente inmigrantes, ahora atendemos más a personas de nacionalidad española con una edad que oscila entre los 25 y los 50 años”, señala. Los datos lo confirman: de las 80.000 acciones e intervenciones realizadas en 2015 a través de los servicios y proyectos de Intervención Social, sólo 8.127 (poco más de un 10%) tuvieron como destinatarias a personas procedentes de otros países, a los que se les ofreció acompañamiento, asistencia social, capacitación, información, mediación, orientación y seguimiento. La memoria de Cruz Roja revela que los núcleos con mayor población en una situación de precariedad son Las Galletas y El Fraile, ambos en el municipio de Arona, y San Isidro, en Granadilla de Abona. A esos lugares fue a parar la mayoría de la ayuda básica (alimentos, sobre todo) que repartió la organización. Además, se contabilizaron 70.000 acciones para transportar diariamente a personas con alguna discapacidad, tanto física como psíquica, a centros educativos, sociales y sanitarios.

El año pasado la ayuda de la organización humanitaria llegó a 3.700 hogares

Respecto a las personas mayores, se realizaron 2.500 actuaciones a través del proyecto de Teleasistencia Domiciliaria. A pesar de las dificultades presupuestarias se pudo mantener la Unidad de Emergencia Social (U.E.S.) para personas sin hogar, cuyo radio de acción se limita a Los Cristianos, aunque según pudo conocer este periódico, a lo largo de 2016 se ampliará a El Fraile. El Ayuntamiento de Arona hará entrega en breves fechas de la dotación económica que garantiza la continuidad del servicio, una vez aprobado el presupuesto. Este colectivo, al que se le realizó una labor de seguimiento y movilización a centros sanitarios, con un total de 113 desplazamientos, recibió 1.000 ayudas de alimentos. Paralelamente se acometieron otras 1.000 acciones de orientación, información y asistencia con personas en una situación de extrema vulnerabilidad y otras 300 en prevención de la exclusión residencial. Cruz Roja señala que esta labor ha sido posible gracias al personal contratado y al voluntariado que desarrolla su labor desde los tres centros con los que cuenta la institución en la comarca: San Isidro, San Miguel de Abona y Las Galletas. Para ello se ha contado con la labor de trabajadores sociales, abogados, psicólogos y personal administrativo.

Emergencia social

Cruz Roja distribuyó a lo largo de 2015 en la comarca de Abona más de 3.500 ayudas específicas en materia de emergencia social, entre las que cabe destacar 444 entregas de material escolar, 1.843 ayudas de alimentos, 73 productos de higiene, 134 entregas de juguetes, 202 de vestuario (calzado, complementos y ropa), 32 mantas, 177 de productos sanitarios, dos pagos de recibo de luz y 56 ayudas para alquileres por un importe de 15.000 euros. A estas cantidades hay que añadir la entrega de 10.000 kilos de alimentos provenientes del Fondo de Ayuda Europea para Personas Desfavorecidas (FEAD), de los que se han beneficiado 202 familias de la comarca.