maldito parné

Este no es el camino

La patronal advirtió la pasada semana que aún falta por recuperarse el 56,4% de las empresas perdidas en Canarias durante la crisis, cifra que se eleva al 73,1% en el Estado. En un comunicado, los empresarios señalaban que el número total de empresas activas en España a 1 de enero de 2015 fue de 3.186.878, de las cuales en Canarias asciende a 132.857. Estamos saliendo de la crisis. Estamos viendo la luz al final del túnel, pero está claro que aún queda mucho por hacer para que precisamente esas buenas perspectivas lleguen al bolsillo de los consumidores. Durante la masacre de esta terrible crisis, que ha destruido miles de puestos de trabajo, se han quedado por el camino muchas empresas. Si analizamos la evolución del número de empresas desde el comienzo de la crisis (año 2007), en Canarias se han destruido 7.557 empresas, lo que en términos relativos se traduce en una caída del 5,38%, superior a lo ocurrido a nivel nacional, con la pérdida de 149.779 empresas, el 4,49%. Es en el sector privado donde está la generación de empleo. Para ello, la CEOE lo que viene a decir es que se deje de tirar el dinero con contratos financiados por el Servicio Canario de Empleo (SCE) que al final no dejan de ser temporales y sin continuidad y que más que generar puestos de trabajo, lo que parece es que se dedica dinero para el empleo a políticas sociales. Es evidente que este no es el camino. El Gobierno reclama empleo de calidad, sin embargo, las políticas dedicadas a este fin parace que van destinadas más a los subsidios que a generar el propio empleo y a incentivar al tejido empresarial. Por ello, los empresarios no solo reclaman una reforma del sistema de financiación autonómico que tenga en cuenta las particularidades de nuestras Islas y permita una reducción paulatina de la fiscalidad específica de Canarias, sino también que el Gobierno apueste por un presupuesto orientado a la inversión pública productiva, que a su vez facilite la creación de empleo y que garanticen el Estado del bienestar que necesitamos. Estas medidas, además, deben venir acompañadas de la eliminación de gasto público improductivo, la lucha contra la economía sumergida que aflore empleo y cotizaciones, una mayor política de emprendimiento que ayude a recuperar el tejido empresarial perdido durante la crisis, y una profundización en la reforma laboral que aligere los costes de contratación y permitan una contratación más estable. Este sí que es el camino.

@MariaFresno72