entrevista

Leo García: “No me siento un traidor”

Asegura que presentó la moción de censura porque el Gobierno saliente no caminaba y tenía serias dificultades para desarrollar con éxito todas las políticas que demanda La Victoria de Acentejo. Para Leo García, los vecinos necesitan tener un Gobierno fuerte y estable y el de PP-PSOE no lo era, porque había una crispación continua. Pero, sobre todas las cosas, el único representante del PP en el Ayuntamiento insiste en que no fue él quien expulsó a su excompañero de filas Fermín Correa del PP, sino su indisciplina.

-¿Es cierto que la condición que le puso la dirección del PP para archivar su expediente fue presentar la moción de censura con CC?
“Es totalmente falso. Se me abrió un expediente que luego se archivó porque se valoró mi carácter disciplinado. Actué en base a la línea del número uno en ese momento y tuve que acudir al Comité de Derechos y Garantías del PP, defenderme, mostrar pruebas, y eso motivó que se archivara mi expediente, que nada tiene que ver con la decisión final de presentar la moción de censura”.

-Usted dijo que la relación con el PSOE fue muy tirante. Sin embargo, la que hubo con CC en el anterior mandato tampoco fue fácil. ¿Qué le hace pensar que en esta ocasión será diferente?
“La madurez política que he adquirido en los últimos años. Esa es la fórmula que me ha llevado a plantearme mi participación en este nuevo Gobierno. Después de lo vivido en el mandato 2011-2015 aprendí que no estamos aquí para discutir por motivos personales, por quién sale en la foto o quién no, o por mayor representación de áreas, sino para defender los proyectos como equipo, y de ahí que me sienta parte de uno. Estoy para respaldar las decisiones del alcalde, Haroldo Martín, para que él respalde las mías, y para que juntos apoyemos las de los siete concejales que conforman el Gobierno local. De ahí que sin ocultar lo vivido en el mandato anterior, considere que se abre una nueva etapa. La experiencia es un grado, pero la ilusión es otra y ahora toca ilusionarse con un futuro mucho mejor”.

Leo García. | FRAN PALLERO
Leo García. | FRAN PALLERO

-¿Esa experiencia puede llevar a que sea el candidato en 2019?
“Mi responsabilidad con el PP de Tenerife y el de La Victoria para garantizar estabilidad y que el PP no desaparezca del municipio se ciñe a este mandato, y no pensando en que mi próxima parada debe ser la cita electoral de 2019. No está en mis planes ni es una idea que contemple. Nunca lo he hecho ni me lo he propuesto. Me desvinculo totalmente de esa candidatura”.

-¿Tan crítica era la situación de las arcas municipales cuando PP y PSOE llegaron al Gobierno?
“Existía una deuda de 1,6 millones, como bien se ha dicho, pero lo que no es cierto es que no hubiera dinero para hacerle frente a las facturas pendientes de pago. Se trata de una verdad a medias, lo que pasa es que ha utilizado de una manera partidista e interesada para atacar al anterior grupo de gobierno, del que tanto Fermín Correa como yo formábamos parte junto con los concejales nacionalistas. En ese sentido, vivíamos en una contradicción constante”.

-Pero Fermín Correa dijo en varias ocasiones que se le ocultaba información por parte de CC, sobre todo de tipo económica. ¿Usted también la sufrió?
“Existieron al principio del mandato ciertas trabas para acceder a toda la información económica del Ayuntamiento, pero al final desaparecieron. ¿Usted cree que un primer teniente de alcalde puede tener barreras para acceder a la información? Y de tenerlas, ¿mantendría su puesto o pediría explicaciones que llegarían a modificar incluso la estructura de gobierno por este hecho?”.

-Ahora el primer teniente de alcalde es usted y tiene la responsabilidad de llevar el área económica, ¿ha tenido tiempo de revisar las cuentas del Ayuntamiento?
“Ahora mismo estamos procediendo al cierre de la liquidación y del ejercicio de 2015 y cuando se culmine tendremos la posibilidad de conocer la deuda que existe en las arcas municipales”.

-¿Seguirá adelante con la auditoría que encargó Fermín Correa?
“Fue una cuestión que planteamos tanto el alcalde como yo y ahora mismo barajamos dos posibilidades: paralizarla y concluir el procedimiento abierto hace algunas semanas, o terminarla. Yo defiendo esta última opción. No solo porque ha costado más de 4.000 euros, sino porque si no hay nada que esconder deben salir a la luz esos datos que demuestran que se respetó el presupuesto acordado en ese momento y si se llegó a un sobrecoste, que se justifique”.

-Si algo no quedó claro en la moción de censura fue quién negoció con el PSOE para formar gobierno el 13 de junio.
“Nunca bajé unas escaleras el día que tomó posesión la nueva Corporación. Por el contrario, lo único que hice fue subirlas, ocupar mi asiento y ahí Fermín Correa me dijo que debía votar por él. Lógicamente incumplí una directriz del PP del día anterior, pero en ningún caso he sido el concejal negociador ni he dirigido las líneas de un pacto en escalera porque eso le correspondía al número uno. Si este último no supo conformar un pacto en las últimas tres semanas ni de última hora, mi pregunta es cómo ocupaba la cabeza de lista de esa candidatura”.

-Usted dijo en el Pleno que las relaciones con Correa se habían empezado a deteriorar a finales de 2014, ¿eso lo sabía el partido?
“El PP tenía conocimiento de alguna forma de mi relación distante con Fermín desde las fiestas patronales de ese mismo año. Fue allí cuando empezamos a vivir una relación tirante por la falta de relación entre él y Haroldo Martín y yo estaba en medio. De forma indirecta formé parte porque era su compañero, pero hubo situaciones muy tensas. El último año de gobierno fue muy complicado”.

-¿Cómo se siente cuando lo llaman traidor?
“No me siento traidor, por eso no puedo describir qué se siente. Traidor son aquellos que hablan en toda España de no pactar con el PP porque almacena una serie de corruptos y luego en La Victoria se aferran al PP para no perder su puesto de trabajo. Yo represento a las personas que votaron al PP en 2015 y apostaron por un cambio basado en el respeto y la coherencia. No le debo nada al PSOE y este nunca marcará mi camino”.