Tres de los cuatro grupos de la oposición, Partido Popular (PP), Somos Icodenses (SI) y Ciudadanos (C’s) temen que el alcalde de Icod de los Vinos, Francis González (CC), “se salte” el pleno para aprobar el presupuesto de este año y lo haga en la Junta de Gobierno Local.

La oposición advierte en un comunicado conjunto la posibilidad de que el mandatario se acoja a la excepcionalidad que permite la disposición adicional décimosexta de la Ley de Bases de Régimen Local, en la redacción dada a la misma por la Ley 27/2013 de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración local, e intente dar el visto bueno a las cuentas de 2016 únicamente con la aprobación de los siete concejales nacionalistas.

Los tres aseguran que CC “se negó en rotundo a aceptar las sugerencias que de forma unánime le fueron presentadas por todos los grupos de la oposición”. Ello provocó que en el pleno celebrado el sábado 30 de enero, el documento económico fuera dejado sobre la mesa por catorce votos contra siete, “y con las protestas del alcalde”, que afirmaba que eso no podía ocurrir.

El objeto de esta decisión, como manifestaron todos los grupos opositores, no era rechazar las cuentas, “cosa que podían haber hecho”, sino convencer al gobierno de la necesidad de cambiar algunas partidas, en su opinión “exageradamente dotadas”, como las destinadas a Fiestas, contrataciones externas de personal, y aumento de concejales liberados con sueldos. Por el contrario, añaden, se reducían “sorprendentemente” los gastos sociales, las dotaciones para el mantenimientos de vías e infraestructuras, y no se contemplaba la ejecución de obras aprobadas en Pleno.

Para su sorpresa, el alcalde convocó una nueva sesión el día 5 de febrero, en la que presentó una enmienda a su propio documento, que la oposición “no tuvo tiempo de estudiar, con ligeras modificaciones que resultaron meramente cosméticas, y que mantenían en esencia la estructura del documento original que ya había sido rechazado”.

En esa ocasión, González “desautorizó” todas las enmiendas presentadas “en su opinión por defecto de forma, que fueron rechazadas en su práctica totalidad”, excepto una que pedía recuperar la dotación de 240.000 euros en ayudas asistenciales que habían reducido a 210.000 euros, y alguna otra de carácter menor. Como consecuencia, toda la oposición, incluido el PSOE, explicaron que no podían aceptar unas cuentas “que se les trataba de imponer”, reiterando la necesidad de modificarlas y consensuarlas.

Llegado el momento de la votación el regidor nacionalista, con el asesoramiento de la secretaría, “se negó a retirar el documento, a que quedará de nuevo sobre la mesa, o a que pudiera ser devuelto al grupo de gobierno”, como solicitaba toda la oposición. Al votar el documento, éste fue rechazado por 8 votos, 3 del PP, el mismo número de SI, uno de Ciudadanos (1) y uno del PSOE, contra 7 de CC. El resto de ediles del PSOE se abstuvo, impidiendo así su aprobación.

Al respecto, su secretario general Manuel Ramón Luis Socas también envió un escrito en el que deja claro que el acuerdo “de no agresión o de gobernabilidad”, firmado con CC al inicio del mandato implica consensuar de “manera real” la política municipal. Por ello, espera que el alcalde “recapacite” y acepte las sugerencias del PSOE, que redundarán en el interés general del municipio.