José Ramón Navarro, nuevo presidente del TSJC

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

El magistrado tinerfeño José Ramón Navarro Miranda, de 53 años de edad, fue elegido ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) como nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia de Canarias.

Navarro derrotó en la votación final de forma holgada a su oponente, el palmero Humberto Guadalupe Hernández, por 15 votos a 6, a pesar de que la mayoría cualificada que requería solo necesitaba de 13 votos. La candidatura de ambos, que en la actualidad desempeñan la Presidencia de la Audiencia provincial de Santa Cruz de Tenerife (Navarro) y la Presidencia de la Sala de lo Social del propio TSJC (Guadalupe) fue aceptada por dicho consejo la semana pasada al estimarlos aptos para el cargo al que aspiraban.

El tinerfeño era considerado claro favorito frente a Guadalupe dado que contaba con apoyos reconocidos entre los distintos sectores de influencia que en la actualidad conviven en el consejo. Sin duda que a ello contribuyó su conocido carácter conciliador (es miembro de la Asociación Francisco de Vitoria), además de la elogiada presentación de su candidatura, donde hizo especial énfasis en la lucha contra la violencia machista y en una mejora sustancial en las inspecciones de los órganos jurisdiccionales.

Navarro sustituye al frente del máximo órgano jurisdiccional de la justicia del Archipiélago al magistrado Antonio Castro Feliciano, que se jubila al cumplir la edad reglamentaria.

BIOGRAFÍA

José Ramón Navarro Miranda nació en Santa Cruz de Tenerife el 16 de noviembre de 1959, y es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid con la promoción 1976-1981.

Navarro optó por seguir con los libros en vez de ejercer la abogacía, y en apenas tres años ingresó por concurso-oposición, en el Cuerpo Jurídico de la Defensa con el número uno de su promoción, allá por 1984.

Con posterioridad, el tinerfeño ingresó en la carrera judicial con categoría de juez el 12 de noviembre de 1991, al haber superado el concurso entre juristas de reconocida competencia, convocado por acuerdo del pleno del Consejo General del Poder Judicial.

Su primer destino fue el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de San Vicente del Raspeig (Alicante). Entre 1992 y 1995 fue destinado al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 2 de Icod de los Vinos. Después pasó al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de La Orotava hasta diciembre de 1996. Fue promocionado a la categoría de magistrado en 1996 (real decreto 2735/96, de 27 de diciembre, habiendo estado destinado en los siguientes órganos jurisdiccionales: Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Manresa (Barcelona) Juzgado de Instrucción nº 1 de Santa Cruz de Tenerife. Finalmente, desde hace ocho años, preside la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife.

José Ramón Navarro Miranda destaca, además, en su labor como como docente y conferenciante, siendo ponente en diversos seminarios y conferencias así como autor, entre otros, de Criterios de la Ley Procesal. También es miembro de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación desde 1986, así como profesor tutor de la Universidad Nacional de Educación a Distancia y profesor de la Escuela de Práctica Jurídica.

Ha recibido diversas condecoraciones, entre ellas la Medalla a la Justicia del Gobierno regional.

El nuevo presidente del TSJC, José Ramón Navarro, en el Palacio de Justicia santacrucero. / DA

“Una gran responsabilidad: por el cargo y por sustituir a Antonio Castro Feliciano”

El todavía presidente de la Audiencia provincial de Santa Cruz de Tenerife, José Ramón Navarro Miranda, declaró ayer a DIARIO DE AVISOS que su nombramiento como nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia de Canarias supone “una gran responsabilidad, tanto por lo que implica un cargo de estas características como por el hecho que supone sustituir a un magistrado del nivel de Antonio Castro Feliciano”.

Navarro, que responde a estas preguntas apenas unos minutos después de recibir la noticia sobre el mayoritario respaldo con el que ha contado en el Consejo General del Poder Judicial, se reconoció “algo abrumado ante esta muestra de confianza [recibió 15 de los 21 votos posibles] pero también ilusionado por la tarea que se afronta”.

Este magistrado tinerfeño, que tomará posesión del cargo el próximo 23 de abril en una ceremonia que tendrá lugar en Las Palmas de Gran Canaria, quiso tener palabras de elogio para su antecesor: “Antonio Castro es una personalidad destacada de la justicia en las Islas que ha jugado un papel fundamental y al que tengo gran respeto, tanto profesional como personal: Ha sido un gran presidente del Tribunal Superior de Justicia de Canarias”. Navarro, quien no quiso entrar en materias propias de su nuevo cargo, es un conocido defensor de las políticas de lucha contra la violencia doméstica y tiene fama de conocer de primera mano la actualidad de los juzgados y el pulso de la calle, antítesis de la imagen del juez atrincherado en su despacho.

De talante conciliador, goza de predicamento social y está bien valorado tanto a nivel autonómico como nacional, y ahí está la prueba del holgado respaldo recibido en el citado consejo. Los que lo conocen aún más saben de su interés por las nuevas tecnologías, la historia y el deporte.

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NOMBRAMIENTOS

Presidente de la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJC. Es la otra decisión que afecta directamente a Canarias. Será Pedro Manuel Hernández Cordobés quien presida una sala en la que, por ejemplo, se decidirá sobre la intervención de CajaCanarias. Hernández Cordobés no tuvo oponente y concitó 19 votos.

Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional. El pleno del CGPJ eligió con el apoyo de 14 de sus vocales al magistrado Eduardo Ortega Martín. Forma parte de la citada sala y su candidatura ha prevalecido sobre las de Eduardo Menéndez Rexach, que obtuvo seis votos y la del magistrado Ángel Arozamena Laso, quien obtuvo un único apoyo durante la votación.

Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Susana Polo García formará parte de la Sala de lo Civil y Penal del Alto Tribunal de la Comunidad de Madrid, que es la encargada de investigar causas con aforados.

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