El municipio acepta, por fin, que Anaga sea Reserva de la Biosfera

Panorámica de El Batán, caserío del macizo que está adscrito al municipio de La Laguna. / DA

J. F. J. | La Laguna

El Ayuntamiento de La Laguna ha confirmado que secundará, junto a Santa Cruz, Tegueste y el Cabildo insular, la candidatura del Macizo de Anaga a Reserva Mundial de la Biosfera por parte de la Unesco. Tras varios años de duras negociaciones, los vecinos de los cinco caseríos de la zona pertenecientes al municipio lagunero -Carboneras, El Batán, Chinamada, Bejía y El Río-Cabeza Toro- han dado su apoyo a la iniciativa, que mañana jueves deberá ser refrendada por el pleno municipal, a través de una moción institucional del grupo de gobierno. A partir de ahí, la decisión final corresponderá a la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

“Es un sello de calidad para Anaga y un orgullo para toda la Isla”, celebró ayer el concejal lagunero Miguel Ángel González, principal interlocutor con los vecinos del municipio afectado por esta declaración. “En un principio, había muchas dudas por parte de ellos a aceptar la candidatura. Pero la filosofía ha cambiado y, tras dos multitudinarias asambleas en Las Carboneras y El Batán, hemos conseguido que la propuesta salga adelante por unanimidad. Confiamos en que en el plazo de un año esté definitivamente resuelto el expediente por parte de la Unesco”.

González espera que la candidatura también sea respaldada por los cinco partidos políticos con representación en el pleno municipal. “La iniciativa tiene el consenso vecinal y eso es lo que hay que valorar”, señaló. Además, apuntó, ha quedado claro que la declaración de Reserva Mundial de la Biosfera “no supondrá más restricciones que las que ya recoge el Plan Rector de Anaga y el Plan General de Ordenación del municipio”.

Otra reticencia corregida, dijo, es que será la oficina del Parque Rural de Anaga, y no un consorcio de nueva creación, el que se encargará de gestionar la futura declaración. Reconoce el concejal lagunero que, si finalmente se logra el título por parte de la Unesco, “supondría un premio para quienes han vivido y cuidado de Anaga, además de un reconocimiento a una forma de hacer bien las cosas”.