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Recogida de firmas para una calle a Cubillo en Buen Paso

   

LUIS F. FEBLES | Icod de los Vinos

Un grupo de vecinos de Buen Paso, en Icod de los Vinos, ha iniciado una campaña de recogida de firmas para homenajear y solicitar una calle en el barrio para el que fuera líder del independentismo canario, Antonio de León Cubillo. Esta iniciativa, que genera aceptaciones y controversias, se ampara en la fuerte vinculación del también abogado sindicalista con este núcleo icodense, donde residió en su juventud y su madre fue maestra, así como su labor en pro de la defensa de los trabajadores durante la larga dictadura franquista en Canarias.

Con un total de 100 firmas obtenidas hasta el momento entre gran parte de los residentes de Buen Paso, la medida popular pretende ser llevada al pleno municipal a través de uno de los partidos con representación en el Ayuntamiento.

“Sabemos que hay gente que no comparte sus ideas, pero ha sido un personaje histórico que dejó su impronta en el barrio. Descartamos la opción de presentar las rúbricas por el Registro Municipal dado que sabemos que se dejarán en algún cajón de la Administración local; no creo que nuestro alcalde, Juan José Dorta, apoye esta petición”, indicaron a DIARIO DE AVISOS representantes vecinales de la zona. El propósito inicial es rotular una calle transversal, entre el paseo Concepción del Castillo Romero y la Sabina, con el nombre de Antonio Cubillo.

Cabe recordar que el concejal nacionalista del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife Hilario Rodríguez afirmó recientemente que presentará una moción en el pleno de hoy para rendir homenaje a la figura de Cubillo, a pesar del rechazo de los grupos municipales del PSOE y del Partido Popular y de las afirmaciones contrarias del alcalde, José Manuel Bermúdez.

El creador de la bandera de las siete estrellas verdes falleció en 2012, en Santa Cruz, cuando contaba con 82 años de edad. Antonio Cubillo tenía problemas de salud, en especial circulatorios, desde que en 1978, en su exilio de Argel, sufriera un atentado que más tarde se comprobó que fue obra de los servicios de inteligencia españoles. Las secuelas de ese intento de asesinato impedían a Cubillo andar por su propio pie, de ahí que se ayudara de muletas o de una silla de ruedas.

La última decisión sobre esta polémica cuestión la tendrá el Consistorio icodense.