DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife
-¿Cuál es la importancia del patrimonio cultural de Santa Cruz?
“Estoy de acuerdo con algún clásico cuando afirma que una comunidad, una ciudad como Santa Cruz, no puede ser creativa e innovadora si no está sustentada por una reserva de pasado, por una conciencia clara de sus raíces, de su identidad histórica. Santa Cruz tiene una trayectoria marítima de cinco siglos, habiendo combinado con sabiduría lo local con lo internacional. Antes de la generalización del transporte aéreo, se ha nutrido de la cultura internacional que le venía exclusivamente a través de su puerto, conectado con mercados lejanos en Europa y América. Pero al mismo tiempo se ha alimentado de una cultura proveniente del interior de Tenerife. Junto al vino o los plátanos venían costumbres campesinas, formas de ver el mundo diferentes de las de la ciudad. Este diálogo entre isla y océano ha dado un sello particular a Santa Cruz, que se manifiesta no sólo en sus fiestas o su lenguaje, sino también en su patrimonio histórico-artístico, de primera categoría internacional”.
-¿Cuál es su estado actual?
“Debido a la desidia del actual grupo de gobierno municipal, hoy es un patrimonio invisible a la mayoría de los tinerfeños. Muchos ciudadanos, entre los que me encuentro, han denunciado su olvido y su abandono: la red de fortificaciones, el viejo muelle del siglo XVIII, la Casa Carta en la plaza de la Candelaria -el mejor ejemplo de arquitectura civil de esa época-, el barrio de los Hoteles, el Toscal con sus casas de artesanos y comerciantes, el cementerio romántico de San Rafael y San Roque… La gente ignora, por ejemplo, que tenemos unos 100 edificios racionalistas, construidos entre 1927 y 1950, que, junto a otros lugares, constituyen un patrimonio mundial único. En cualquier ciudad europea del mismo tamaño estarían orgullosos de este patrimonio, pero al Ayuntamiento actual no le interesa. Vea el deterioro de nuestros bienes de interés cultural (BIC) que existen”.
-En tiempos de crisis económica, hay quien piensa que la cultura es un aspecto secundario, que primero hay que generar actividad empresarial y empleo. ¿Qué opina usted al respecto?
“Que el que opine así se equivoca. Existe la mil veces probada economía de la cultura, que genera miles de puestos de trabajo y posibilita la creación de numerosas empresas de servicio en muchas ciudades del mundo: rehabilitación de edificios, restauración de obras de arte y documentación, libros, cine, fotografía, diseño, internet, guías de turismo, hostelería, teatro en la calle, comercio de souvenires, música, etc. Santa Cruz tiene un gran potencial en este terreno. Sería un buen complemento al puerto, a la Refinería, al comercio y la administración pública”.
-Hábleme de alguna iniciativa cultural en Santa Cruz propuesta por la candidatura de Julio Pérez al Ayuntamiento.
“Últimamente hemos dado a conocer a la opinión pública de Santa Cruz el proyecto de creación de un Museo Marítimo y Naval que complete al Museo Regional Militar, sito en el cuartel de Almeida. Proponemos su instalación en el Muelle Norte, aprovechando los edificios de interés histórico que se ubican allí: la antigua estación del jet-foil, el edificio de los prácticos, el de la antigua Junta de Obras del Puerto y el propio correíllo La Palma. Allí el ciudadano o el crucerista podrá disfrutar de un viaje al pasado, cuando corsarios y escuadras enemigas asaltaban nuestras costas, cuando científicos como Cook, Bligh o Humboldt recalaban por aquí, cuando las gabarras de carboneo surtían a los vapores extranjeros en ruta hacia otros continentes”.