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La industria, sujeta a inversiones remotas

   

Las actividades innovadoras y la explotación de las nuevas tecnologías son una gran oportunidad. / ACFI

EUGENIA PAIZ | SANTA CRUZ DE LA PALMA

Aproximadamente un 20% del suelo industrial del que dispone la isla de La Palma, un total de apenas un millón de metros cuadrados frente a un un total de 4.724.696 metros cuadrados de superficie concebida para este fin en los distintos planeamientos municipales y en el suelo reservado en el marco del Plan Insular de Ordenación, está actualmente en explotación.

Pero las cosas podrían comenzar a cambiar a medio plazo. En eso confían las patronales palmeras, ávidas por un desarrollo industrial sobre el que se ha venido planificando desde hace más de un década pero que no ha terminado de despegar por la falta de inversión y por la carestía del suelo.

En La Palma, que ocupa una posición logística complicada en base a su doble insularidad y sin materias primas, la industria tradicional de transformación y de generación de riqueza pasa por conceptos como “transformación agroindustrial, almacenamiento logístico, actividades innovadoras y explotación de las nuevas tecnologías”, algo en lo que jugará un papel fundamental, dicen los más optimistas, el despliegue de infraestructuras neutras, como el anillo insular de Tenerife, el NAP (Neutral Network Access Point West África Canary Islands) y su conexión con Europa y África: esto abre la puerta a la implantación de instalaciones que tengan que ver con las nuevas tecnologías, peor también permite una mejora de la conectividad y la competitividad de las futuras industrias que se instalen en la Isla, con una rebaja importante en los costes de conexión.

A la espera de que esa inversión se produzca y empiece a consolidarse la generación de riqueza, la industria en La Palma es sólo testimonial y eso pese a que todos los polígonos industriales de la Isla se benefician de la baja fiscalidad que contempla la Zona Especial Canaria.

Esas ventajas fiscales se ven condicionadas no por la escasez de suelo industrial, un hándicap histórico que ahora, con aprobación del Plan Insular de Ordenación se ha solucionado dado que contempla reservas importantes de suelo para el desarrollo industrial, pero que se ve supeditado a lo que los potenciales nuevos industriales entienden como “excesivo coste del precio del suelo”, que sigue frenando las posibilidades de inversión y ralentiza el crecimiento de un sector productivo que desde el cierre de la fábrica Japan Tabacco Internacional en El Paso, once años atrás, no ha logrado recuperarse.

Tareas pendientes
El presidente de la delegación palmera de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación, Isael Castro, asegura que existen “oportunidades” para el desarrollo industrial de la Isla tras señalar sus “debilidades”, entre las que figuran los sobrecostes a la comercialización, la lejanía, la fragmentación del territorio y la ultraperificidad. A esto añade la falta de mano de obra cualificada, otro elemento a tener en cuenta en el diagnóstico de la situación actual. Pero Castro destaca como importantes lo factores que pueden repercutir en el desarrollo industrial. Entre ellos, la existencia de los planes de ordenación reguladores de zonas de explotación industrial; la liberalización del suelo; la construcción de parques tecnológicos y la mejora del equipamiento en el mapa insular de las zonas Industriales. A esto Isael Castro suma el aprovechamiento de las herramientas fiscales de la zona ZEC, el REF y el REA. Además subraya las bondades del programa regional de apoyo a la industrialización y los incentivos para la implantación de formulas mixtas de inversión. El presidente de la patronal recuerda que La Palma no ha logrado incrementar la inversión en investigación y desarrollo ni ha podido generar la tan necesaria cultura de la innovación empresarial, que sigue siendo una asignatura pendiente.

Si bien la carestía del suelo industrial es el principal hándicap de los potenciales inversores, los propietarios y promotores de estos suelos recuerdan que “son espacios en los que se han invertido grandes cantidad de dinero, y donde las expectativas de rentabilidad para las empresas que se instalen son mucho más altas”.

Distintas fuentes consultadas cifran entre 300 y 600 euros el precio del metro cuadrado de estas superficies, una cantidad que está condicionada por su proximidad a puntos estratégicos como puerto y aeropuerto, así como de los servicios de los que dispone.

Así las cosas, ubicaciones como la zona industrial de Mirca, el polígono industrial de Las Manchas, así como el espacio industrial de El Paso, entre la antigua fábrica de tabaco, la recta Padrón y el paraje de Fátima, entre otros, son lugares ideales para el desarrollo de proyectos industriales pero excesivamente caros desde un punto de vista estrictamente financiero.

Los empresarios del sector servicios, interesados en el desarrollo de la industria en La Palma, explican que la economía insular no puede apoyarse exclusivamente en el sector agrícola, “a la espera como estamos de una estabilidad y un crecimiento del sector turístico, sino que hay que apostar por el sector industrial en La Palma a pesar de los problemas que este segmento sufre en toda Canarias, enfrentándose a problemas como el aislamiento, las fuentes de energía y la comercialización”.

En La Palma se han intentado engrasar desde la Consejería de Industria los mecanismos de colaboración con el Cabildo y con los ayuntamientos a fin de animar e incentivar una inversión que en el marco actual de mala coyuntura económica, parece aún más inalcanzable, pero que de lograrse podrían diversificar la economía de la Isla.

Entre esos objetivos ha estado, por ejemplo, la constitución de empresas vinculadas a la ciencia y las nuevas tecnologías asociadas al Observatorio Astrofísico. Esta sigue siendo una meta poco accesible en cuya consecución debería colaborar el Instituto Astrofísico de Canarias. Esta idea tiene como esencia la colocación de la Isla en un lugar de privilegio en materia de investigación científica.