“El Tegueste y el Tenerife son mis grandes pasiones”

Entrega del Premio Canarias de Lucha a Encho Rodríguez (a la izquierda). / ACFI PRESS

LUIS DE LA CRUZ | Santa Cruz

Noble, trabajador y un hombre muy arraigado a nuestras costumbres. Encho Rodríguez, durante 38 años, ha sido el presidente de uno de los grandes equipos de lucha de Canarias como es el Tegueste. El teguestero anunció públicamente que, “cuando termine la temporada, dejaré la presidencia del club de toda mi vida”. Rodríguez confiesa que “tanto el Tegueste como el CD Tenerife son mis dos grandes pasiones deportivas, y siempre los apoyaré”.

Sobre la decisión de dejar el Tegueste, apunta que “muchos años en el mismo cargo desgastan y tengo algo descuidada a mi familia; también necesito más tiempo para el negocio, pues debo atenderlo, porque llevar un equipo deportivo exige mucho tiempo y hay que quitárselo a otras cosas”.

En referencia a las vivencias en el Tegueste, apunta que “han sido bastantes porque 38 años al frente del club ha dado para mucho. Me quedo con los amigos que he hecho durante este tiempo y el trabajo realizado en equipo, con muchas personas, para que el Tegueste siguiera vivo. Además, me siento orgulloso de que durante años fuéramos de los pocos equipos de Tenerife que apostamos por la máxima categoría. Casi siempre hemos tenido muchos luchadores de nuestro pueblo y eso no es fácil para competir en la élite”.

Sobre la situación actual del Tegueste, refleja que “se está trabajando muy bien desde las escuelas municipales, y eso hace que el futuro del club esté garantizado para los próximos años”. Además, remarca que “no tuvimos demasiada fortuna en la Liga, pero llegamos a las semifinales del Trofeo Ciudad de La Laguna de Primera y los luchadores están dando la cara en la fase clasificatoria de la Liga Nacional de Canarias”. Sobre el futuro del equipo, remarcó que “este club cuenta con casi 400 socios y hay gente muy capacitada para hacerse cargo de la directiva y nosotros les ayudaremos en lo que ellos quieran”.

Un sentimiento

Es un birria hasta la muerte. Llueve o truene siempre acude al estadio y para él no es nuevo animar al Tenerife en la Segunda B. Sobre la situación del equipo blanquiazul, apunta: “Después de hacer las cosas muy bien y de ascender a Primera División, se hizo todo al revés y en dos años nos metimos en el pozo del fútbol. Ahora ya no hay tiempo para lamentaciones y hay que darse cuenta de todos los errores cometidos para así alcanzar cuanto antes la Segunda División y, a partir de ahí, soñar”.

Sobre si los aficionados abandonarán al equipo representivo, fue muy claro: “Yo no lo haré y, si el club engancha de entrada una serie de buenos resultados, seguro que habrá muy buenas entradas en el estadio. A veces no hay mal que por bien no venga, y ahora no queda otro remedio que tirar de la cantera y sacar los buenos jugadores que hay en la tierra”.