El estudio geotécnico sobre Santa Lucía tardará un mes en conocerse

El alcalde ha estado en permanente contacto con los vecinos. / JAVIER GANIVET

NORBERTO CHIJEB | Güímar

Al menos veintisiete casas, en algunos casos pequeños cuartos, del centenar que ocupa el núcleo urbano de Santa Lucía-Los Barrancos, en el litoral de Agache, corren cierto riesgo de que no puedan volver a ser habitadas, tal y como se desprende del estudio inicial de los ingenieros tras el derrumbe de hace nueve días, lo que determinó el precinto de esas estancias.

El alcalde de Güímar, Rafael Yanes; los nuevos concejales Airam Puerta y Carlos Guanche, así como el ingeniero encargado de redactar el informe geotécnico de la zona, Javier Velasco, se reunieron ayer con los vecinos de Santa Lucía para advertirles que el informe definitivo no se conocerá hasta dentro de un mes, aunque hasta entonces se decidió solicitar un presupuesto a una empresa privada especializada para llevar a cabo la limpieza de los escombros producidos por el derrumbe.

Yanes recordó a los vecinos la importancia de que este proyecto sea lo más exhaustivo posible para poder determinar la peligrosidad de la zona, así como las obras de restauración necesarias para que los vecinos afectados puedan volver a sus viviendas, todas ellas en el interior o exterior de una gran cueva natural, algo que ya se considera improbable ante el elevado coste económico al que habría que hacer frente, aparte de que sobre Santa Lucía-Los Barrancos existen nada menos que 50 expedientes abiertos por la Demarcación de Costas por ocupación del dominio público marítimo terrestre.

El presidente de la Asociación de Vecinos de Santa Lucía, José Herrera, mostró su interés por las ocho personas que aún siguen realojadas en un hotel rural a cargo del Ayuntamiento. El alcalde, por su parte, informó de que el Patronato de Servicios Sociales se encarga de ellos, con la colaboración de la Dirección General de la Vivienda.