EUGENIA PAIZ | Mazo
Cientos de personas se sumaron ayer a la celebración litúrgica del Corpus Christi en Villa de Mazo, de la que participaron autoridades civiles y militares acompañando en procesión al Santísimo Sacramento durante más de una hora de procesión.
Este fue el momento cumbre de una fiesta religiosa marcada por la tradición popular que cada año atrae a visitantes llegados desde todos los puntos de la Isla y que ocupa un lugar destacado dentro de las fiestas populares del Archipiélago canario.
El Corpus lució en todo su esplendor como expresión máximos del fervor religioso y la tradición popular de la Villa, dando significación al lugar de preferencia que ocupa como fiesta emblemática del territorio insular, declarada de Interés Turístico Nacional a finales de la década de los 90.
Personas de toda condición y edad se sumaron a la solemne eucaristía, que este año se celebró, por las obras que se acometen en e templo parroquial de San Blas, en el Centro de la Cultura Andares, una celebración presidida por Víctor Manuel Álvarez Torres, canciller-secretario general del Obispado de Tenerife, que estuvo acompañado por sacerdotes de la Isla.
El tradicional recorrido procesional engalanado para la ocasión con arcos, tapices, descansos y alfombras fue, como marcan los cánones de la fiesta, la exaltación de la naturaleza y del trabajo artesano al paso del Santísimo, que volvió a contar con la entrega y la devoción de los vecinos de Villa de Mazo.
[apunte]
Testimonio de arte popular hasta el domingo
El Corpus de Villa de Mazo, con la laboriosa ofrenda de los vecinos en el trabajo artesano de arcos, descansos y tapices, constituye todo un espectáculo para los sentidos que podrá contemplarse hasta la tarde del domingo hasta la ofrenda del próximo año.
[/apunte]