
EFE | MADRID
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó ayer que la democracia no va a permitir la coacción, intimidación o el intento de que las instituciones democráticas no funcionen. Durante el pleno de la Cámara Alta, Zapatero respondió así al senador de CiU Jordi Vilajoana, en referencia al boicot que hicieron el pasado miércoles cientos de indignados en el debate de los presupuestos en el Parlamento de Cataluña.
El senador de CiU recordó que el Parlamento sufrió un acoso “intolerable y sin precedentes”, y subrayó que la Cámara representa al pueblo de Cataluña y es la expresión de la voluntad popular manifestada en las urnas.
“Todos tenemos derecho a quejarnos e incluso a indignarnos, pero sin agredir”, señaló Vilajoana. Recordó que existen canales que la democracia garantiza para defender todas las posturas, “incluidas las discrepantes”.
Zapatero “respaldó” con “carácter institucional” la declaración formulada por el Parlamento de Cataluña, y afirmó que el marco constitucional español “garantiza” el derecho de manifestación y la libertad de expresión “de forma plena y absoluta, y todas las instituciones lo respetan”. También ayer, el PSOE aseguró que no ha emprendido contactos con representantes del llamado movimiento 15-M, pero que estos colectivos tienen abiertas las puertas para enviar propuestas.