XIX UNIVERSIDAD DE VERANO DE ADEJE >

“Educación para la Ciudadanía no es el catecismo socialista”

JOSÉ L. CONDE | ADEJE

“La asignatura Educación para la Ciudadanía no es el catecismo socialista. Nos enseña a vivir en plena tolerancia”, ha manifestado Teresa González Pérez, directora de la ponencia Educación y Ciudadanía que la semana pasada se desarrolló en la XIX Universidad de Verano de Adeje. Teresa González es doctora de Teoría de Historia de la Educación por la Universidad de La Laguna y autora de varios libros publicados sobre mujer, educación y emigración.

– ¿Qué valoración hace del curso?

“Ha sido bastante positivo no solo por la participación del alumnado sino por la aportación de los distintos conferenciantes. La conclusión a que hemos llegado es a reconocer la importancia que tiene para todas las personas la asignatura Educación y ciudadanía, donde se nos explica cuáles son nuestros derechos y deberes y las vías de participación en la vida pública. Si estamos en democracia no solo hay que aprender a mantener una convivencia, sino que tenemos la oportunidad de participar en la vida pública, sobre todo de cara a regenerar la vida pública. En el curso ha quedado de relieve la importancia de los movimientos del 15-M, cómo ha contribuido a despertar las conciencias y la confianza en que esa acción no se quede solo en una acampada. Se espera un compromiso y el objetivo de dar un cambio a la sociedad, de cara a una regeneración democrática, algo que necesita el país para afrontar los casos de corrupción, los problemas sociales, etcétera. Quedó patente también que los políticos no deben vivir de espaldas a la sociedad, informando solo puntualmente de las tasas de paro y de los problemas económicos”.

– ¿Está contra la postura del PP de retirar la ley de Educación para la Ciudadanía y Derechos Humanos?

“Estoy particularmente en desacuerdo. Pero además los distintos ponentes y el alumnado también lo han manifestado en varias ocasiones. No solo estamos en desacuerdo, sino que se incumpliría un mandato de la Unión Europea porque la asignatura se incluye porque Europa considera que debía impartirse en todos sus países miembros. Por otra parte, desde el Ministerio de Educación se aborda como una materia curricular importante para las nuevas generaciones, aunque nadie se esperaba en el Gobierno de Zapatero que recibiera esta respuesta. No entendemos esos rótulos de que es el catecismo socialista. No lo es. No se imparte ideología, se enseña a ser ciudadanos. Se nos educa a vivir en plena tolerancia, con respeto hacia los demás y, sobre todo, en este mundo actual tan multicultural a aprender a vivir con personas de otros países, de otras culturas y de otras creencias religiosas. Canarias es un ejemplo de ello. Adeje tiene más de 100 nacionalidades y no hay ningún conflicto social y no pasa nada. Es absurdo que desde el poder se manipule una materia que carece de ideología. Sí había adoctrinamiento en el franquismo con la asignatura de Formación del Espíritu Nacional”.

– ¿Qué papel juega en la sociedad las ciudadanías emergentes?

“En las primeras etapas del curso abordamos la trayectoria histórica ¿Cómo se ha pasado de ser súbdito a ciudadano? Se empezó desde la revolución francesa, con Olimpia de Gouges que en 1791 defiende los derechos de la mujer, reivindicación que le costó su ejecución, hasta la fecha. Desde el principio, las mujeres quedan al margen de la ciudadanía. En España se logra el derecho al voto en 1931, pero luego hay una involución en el franquismo. En África o Asia todavía queda mucho por recorrer”.

-¿Cómo ve la rebelión ciudadana que se está expandiendo por todo el Norte de África?

“Es un ejemplo de cómo los ciudadanos toman las riendas porque no encuentra otra manera de un cambio social y político. El pueblo actual, como en el siglo XVIII, ha salido a la calle y ha pagado con su propia vida esta lucha, similar a lo ocurrido con los movimientos obreros. Hoy disfrutamos de unas ventajas laborales gracias a otros que nos han precedido en esa lucha. Las personas evolucionan pero los políticos se quedan estancados. El pueblo ha madurado y está exigiendo respuestas.”

– ¿Qué influencia tienen las redes sociales en este movimiento?

“Fue uno de los lugares comunes en los debates que siguieron a las conferencias y sobre todo se destacó la importancia del móvil debido a que en occidente se ha recibido información gracias a esas redes. Si no hubieran existido, no nos hubiéramos enterado.”