“Las democracias también necesitan protegerse”

JOSÉ L. CONDE | ADEJE

Juan Manuel Fernández, catedrático de Teoría e Historia de la Educación en la Universidad de Valencia y autor de varios libros sobre escuelas rurales en la república y maestros en el franquismo, participó ayer en la ponencia Educación y Ciudadanía, en la que recordó que todavía sigue la polémica sobre la asignatura de Educación para la ciudadanía, aunque se haya diluido en los medios de comunicación. Concretamente, dijo que está la promesa de Mariano Rajoy de , si accede al poder, retirarla de los colegios. En este sentido, señaló que estamos envueltos en dos éticas, la pública y la privada y que las dos se deben respetar y que hay que educar por tanto en lo que es común a todos la pública, que es la constitucional.

-¿Usted está favor de que se imparta en los colegios Educación para la ciudadanía?

“Sin duda estoy a favor. No es una idea nueva y además se imparte en muchos países de nuestro entorno. El problema en España es que se ha judicializado la polémica porque se ha convertido en un problema ideológico y esto tiene una solución difícil. Hago un llamamiento a la convivencia entre la esfera individual y la colectiva, que no se deben invadir. Entiendo que un Estado maduro debería hacer lo posible a favor de la convivencia entre ambas éticas y esto lo podemos encontrar con una lectura superficial de la material”.

-¿La asignatura de Educación por la Ciudadanía se han planteado en algún momento como una vuelta a anteriores etapas en las que desde el Estado se intenta adoctrinar como en el franquismo?

“Efectivamente en esa etapa se intentaba adoctrinarnos en un tipo de formación como su nombre indica del Espíritu Nacional y solo en eso. Está bien traido a colación porque ha habido líderes del Partido Popular que han expresado las coincidencias entre ambas asignaturas. Pero nada más lejos de la realidad. Nosotros vivimos en un estado democrático, con su Constitución. Yo siempre digo que la democracias necesitan protegerse. Nosotros no nacemos demócratas, nos hacemos demócratas. Y esta carga que no es genética debemos alimentarla con enseñanzas, evidentemente dentro de la Constitución. Fíjese que insisto en que la Constitución es la que nos ampara, es el ámbito de lo público, es el marco en que se encuadra la Educación para la Ciudadanía. Hay una sentencia del Tribunal Supremo que arroja mucha luz sobre este tema. Nos dice claramente que el Estado tiene que enseñar y promover afectos hacia estos derechos y libertades que en definitiva conforman el sustrato de nuestra democracia. Es mucha la tarea, pero es necesaria abordarla”.

-Si en las próximas elecciones ganara el Partido Popular y Mariano Rajoy cumple su promesa de retira la asignatura ¿en qué situación nos encontraríamos?

“Esto sería ponernos en piel ajena y aventurar hipótesis. De momento, está la promesa de eliminación de la asignatura tal y como está pensada hoy. Quiero pensar que aunque sea así el Gobierno si accede al poder debería elaborar una ley del PP, o del que sea, que recogiera los principios fundamentales de ésta, que, insisto, no es mala. Ha sido sobre todo contestada porque afecta o se inmiscuye en el ámbito de la moral privada. Yo no lo entiendo así y si así fuera que obvie esta intromisión en el ámbito de la consciencia, protegiendo el ámbito de lo público, que nos ampara a todos los ciudadanos de cualquier credo”.

-Da la sensación de que los Gobiernos intentan cada vez más penetrar en la esfera de lo privado, por ejemplo, no impartiendo clases de religión católica, sin la cual tampoco es posible entender la idea de Europa…

“Acepto la premisa. En Europa y, claro, en España cada vez son más las morales que existen, tantas como pluralidad de ideas. Si vamos a remitirnos a la raíces, puede que actualmente existan ciudadanos que no se sientan cómodos, pero la democracia es la convivencia. Otro principio básico es la cohesión social que se hace uniéndonos en aquello que podemos compartir y que es lo que debemos salvar. Esto es la construcción del derecho lo que es la ética común”.

-Considera que hay peligro de aumento de la xenofobia debido a la crisis económica

“Siempre se ha dicho que en momentos de penuria se mira peor al de afuera. Hay países donde al extranjero no se le recibe como en España, sino que se le excluye. Quiero decir que hay riesgo de exclusivismo y xenofobia pero tenemos un ordenamiento jurídico y una cultura que no contribuye al desarrollo de estos sentimientos. España tiene suficientes valores jurídicos como para impedirlo y además somos personas que aceptamos al extranjeros sin mucho resabio y no creo que caigamos en este sentimiento”.