EUGENIA PAIZ | BARLOVENTO
Vanessa Rodríguez, a sus 30 años, es la nueva alcaldesa de Barlovento. Una regidora que pretende aplicar un nuevo concepto de la política que pasa por una participación ciudadana que, asegura, condicionará cualquier decisión del nuevo grupo de Gobierno”.
-No parece que éste vaya a ser un mandato sencillo. ¿Cómo lo afronta en medio de esta crisis?
“Sé que la situación es complicada pero estoy ilusionada con este nuevo proyecto. No aspiramos a grandes obras ni inversiones, sino al desarrollo de una política enfocada a los ciudadanos. Estoy muy ilusionada con este nuevo proyecto político, esta nueva etapa de gobierno en Barlovento. Tenemos mucho trabajo y muchas ganas de afrontar los retos que tenemos por delante”.
-Ahora, desde la Alcaldía, ¿cómo ve el municipio?
“He visto al municipio en una situación de apatía, pero se está produciendo un cambio y veo a la gente muy involucrada, con ganas de hacer cosas, de ayudar y participar y eso es muy positivo porque en nuestro proyecto de gobierno los vecinos van a contar en todo. Por ponerle un ejemplo, en la organización de las fiestas patronales hemos visto que el pueblo quiere, como lo queremos nosotros, participe activamente”.
-Esa es la parte más amable en su toma de contacto con la gestión, pero no se pueden obviar los problemas económicos.
“Estamos es una situación económica realmente preocupante. Ahora estamos haciendo un estudio de la situación financiera para determinar qué deben las arcas locales y qué se le debe al Ayuntamiento. Tenemos que buscar estrategias de llevar a cabo un plan de saneamiento. Hay que pagar a las empresas a las que se les debe, una cifra que todavía no conocemos, pero que haremos pública porque los vecinos tienen derecho a saber en qué situación estamos y entiendan que no se puede contratar gente, que no tenemos dinero”.
-¿Hay alguna restricción que notarán de inmediato?
“Sí. Los fondos que el Cabildo aportaba para los dos telecentros, donde se concentra la mayor parte de la vida lúdica de los vecinos, ya no los vamos a tener. Esta semana han cerrado sus puertas. Nos ha llegado por sorpresa, además de la recepción de facturas que llegaron a la Alcaldía la última semana en la que estuvo al frente el anterior alcalde. Se van a tomar decisiones difíciles, pero somos un equipo de personas con mucha capacidad de trabajo y esfuerzo. No tenemos experiencia en la Administración pública, pero somos un grupo de personas dispuestas a buscar recursos, a tocar a todas las puertas”.
-Usted, dentro del PSOE, en comparación con sus compañeros en Los Llanos y Santa Cruz, es una privilegiada, pese a recibir presiones para que no pactaran con el PP.
“Me entristece la situación por la que han tenido que pasar mis compañeros en Santa Cruz y en Los Llanos. Los ciudadanos de La Palma han pedido un cambio y yo creo que esa voluntad del pueblo debe ser entendida por todos. Más allá de las ideologías estamos en un momento en el que debe primar la colaboración entre todos los ayuntamientos”.
-¿Qué posibilidades hay en materia de inversiones, generación de empleo, diversificación, etc.?
“Podemos hacer muchas cosas. Tenemos que recuperar el capital humano que se ha ido perdiendo. Muchos jóvenes de Barlovento que están formados y que están fuera del municipio y de la Isla. Tenemos que atraerles porque eso es vital para el crecimiento de este pueblo”.
-¿Y qué me dice del Plan Parcial de La Fajana?
“Es ilusionante pensar en ese desarrollo, pero no podemos olvidar que ahí tenemos un problema que no ha trascendido pero que llevamos arrastrando muchos años. Los propietarios afectados por el desarrollo de este plan parcial, con tierras o solares, no están de acuerdo con este desarrollo. Hay que respetar que muchos vecinos de este pueblo han trabajado toda su vida para tener esas tierras. Los inversores que lleguen tienen que saber que el Ayuntamiento va a tener en cuenta también los intereses de esas personas”.
-Ese plan parcial sería un alivio importante para las arcas locales.
“Sé que es importante. Pero quiero consensuar con los vecinos todas las decisiones que se tomen. No quiero decisiones unilaterales. Quiero partir de un plan de trabajo de consenso de participación ciudadana”.