VICENTE PÉREZ | Fasnia
El catedrático de la Arqueología de la Universidad de La Laguna Antonio Tejera Gaspar ofreció una conferencia en Fasnia sobre las momias aborígenes, y abordó el caso de una gran cueva funeraria descubierta hace cerca de 250 años en el Sur de Tenerife, que algunos expertos sitúan en el barranco de Herques, límite entre este municipio y el de Güímar, aunque su localización exacta se desconoce.
“No sabemos el número de momias expoliadas en los siglos XVIII y XIX, tampoco dónde están o si son ciertas las referencias que existen sobre momias canarias en Londres, Harvard y Alemania”, aseveró el prestigioso arqueólogo natural de Arico, Premio Canarias de Patrimonio Histórico, según informa el Ayuntamiento de Fasnia.
El ilustrado José de Viera y Clavijo fija la fecha del descubrimiento de la cueva en 1763 o 1764 en un cerro escarpado que contenía cientos de cadáveres guanches embalsamos, algunos de los cuales fueron llevados a Madrid, al Museo Nacional de Antropología.
Esta cueva y el misterio de su ubicación ha dado pie a un libro del que es autor Tejera Gaspar, junto al historiador Daniel García Pulido y el escritor David Galloway, una obra que se ha convertido en un fenómeno editorial. El catedrático abordó en su charla este trabajo, que mezcla la investigación histórica con recursos propios de la novela de misterio para abordar las incógnitas sobre este recinto funerario. En el libro se aportan indicios para intentar su localización, labor que sólo sería posible con un proyecto de investigación en el que participaran instituciones públicas y empresas privadas, con arqueólogos, geólogos y escaladores, como ha defendido en declaraciones a este diario el editor, Francisco Delgado.
Tejera señaló que queda mucho por desentrañar sobre las momias canarias pues “desconocemos la relación entre el proceso de momificación usado por los egipcios y los antiguos aborígenes de las Islas y ni tan siquiera entendemos las diferencias entre los distintos tipos de momificación que se dan en Canarias”.