SANTY TORRES | Santa Cruz de Tenerife
Un delicioso alimento al aire libre. El sueño de toda paloma, pero es solo un cebo. Cuando lo van a recoger, quedan atrapadas en una jaula, y el sueño se convierte en su peor pesadilla. Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Santa Cruz, se asegura que es una medida totalmente necesaria para evitar la transmisión de enfermedades de estas aves hacia los humanos.
El técnico de control de plagas del Ayuntamiento santacrucero Miguel Benedicto, mantiene que el asunto de las palomas es “un tanto desconocido por el público”, ya que no son conscientes del riesgo que producen estas aves si no se controla el volumen de su población. De todas formas, Benedicto quiere dejar bien claro que “no exterminamos a las palomas”, tan solo “tratamos de disminuir la cantidad de estas aves para dejar una población controlada”, añade.
La captura
El Ayuntamiento dispone, actualmente, de unas 27 jaulas, repartidas a lo largo de 25 puntos diferentes de la capital. El máximo nivel de jaulas ha sido 32, y se espera que cuando comiencen nuevamente los colegios, se puedan colocar hasta 40 jaulas en todo Santa Cruz.
Estas cajas pueden ser localizadas en la calle San José, la zona de La Paz, la Rambla Pulido y el puente Zurita, entre otras zonas. Aunque, anteriormente, se han dispuesto estos sistemas en el Hospital de la Candelaria y diversos colegios.“Nos preocupaba más la zona del centro porque es donde más palomas hay, pero esperamos poder actuar también en los barrios”, argumenta Benedicto. Además, “tratamos de retirar los nidos de los laureles”, comenta.
Cada una de estas pequeñas cárceles de captura puede albergar entre 10 y 12 palomas. Cuando no hay espacio para más, se realiza el sacrificio de las mismas. Posteriormente, se limpia y desinfecta la jaula para futuras capturas. “Visitamos las jaulas dos o tres veces por semana, aunque algunas hay que cambiarlas a diario”, apostilla Benedicto.
Algunos datos
Los censos de palomas son muy relativos y complicados de realizar. Se trata de cuadricular zonas para poder hacer un estudio aproximado. Según esto, se estima que Santa Cruz es la residencia de unas seis o siete mil palomas. Sin embargo, con las actuaciones del Ayuntamiento, se puede rebajar esta cifra a tres mil palomas, por lo que la disminución de la población es bastante notoria.
Miguel Benedicto explica que el control de este tipo de plagas puede capturar entre 600 ó 700 palomas cada mes. Asimismo, añade que julio fue un mes destacado, en el sentido de que “se capturaron 1.365 palomas”.
Concienciación
El técnico del Ayuntamiento en materia de plagas opina que “la población está más concienciada que antes sobre la problemática de las palomas”. La gente “está molesta porque las palomas se posan en sus balcones y sufren incomodidades”, apostilla.
A pesar de ello, mucha gente sigue dando de comer a estos animales, aún estando prohibido por las ordenanzas municipales. Pero como bien explica Benedicto, “suele ser gente mayor que no es consciente del peligro, por lo que es muy difícil de sancionar”. Por esta razón, el Ayuntamiento está pensando en una campaña de sensibilización sobre este tema.
Miguel Benedicto hace un llamamiento a los ciudadanos para que “no tengan miedo en contactar con el servicio de control de plagas”, pues es necesaria la prevención. Además, matiza que la higiene es la piedra angular que rige el control de estas poblaciones. Asimismo, ruega que “no se alimenten a los animales en la calle”, ya que, evidentemente, dificulta de algún modo sus operaciones.
Otros métodos
El sistema de jaulas es innovador en nuestra Isla. La gente estaba más acostumbrada a las denominadas redes cañón, pero no a este nuevo modelo. Al parecer los ciudadanos “no querían el sistema de redes”, según informa Benedicto. Además, este método “es bastante más complicado”.
Otra forma de control de las plagas de palomas era la distribución de anticonceptivos, práctica que tuvo que ser abandonada por ser menos eficaz. Benedicto afirma que se requería una dosis diaria de estos fármacos en cada paloma, por lo que no resultaban efectivos.
Ético o no, lo que está claro es que estas aves pueden transmitir enfermedades a las personas. A unos les parecerá lícito sacrificar a algunos de estos pequeños seres, mientras que a otros les parecerá un práctica cruel.
Sea como sea, el organismo de control de plagas obrará para lo que se entiende bueno para los ciudadanos.
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Enfermedades y parásitos
Las palomas producen principalmente problemas respiratorios. Padecen unas 40 enfermedades y más de 60 parásitos. No todos estos microorganismo pueden producir enfermedades en los hombres, pero otros sí que pueden causar diferentes males.
La Psitacosis u ornitosis. La enfermedad la transmiten tanto las aves sanas como las enfermas y se transmite por la vía aérea. Los síntomas comunes son fiebre, dolor de cabeza y problemas respiratorios. Puede provocar neumonía,hepatitis y algún tipo de afección cerebral como la encefalopatía.
La alveolitis alérgica extrínseca también es una enfermedad bastante peligrosa. Afecta al pulmón por medio de una reacción alérgica, la cual puede ocasionar neumonitis.
La Pasteurelosis o fowl cólera es causada por el Pasteurella multocida. Es contagiada por medio de los excrementos. El síntoma principal es una fiebre alta de entre 42 y 45 grados centígrados.
Crytococcosis. Esta enfermedad es causada por un fermento que se encuentra en el intestino de las palomas. Los humanos pueden contagiarse de los nidos de palomas donde se excretan los agentes infecciosos. Puede manifestarse como una meningitis o meningo encefalitis, comenzando por tos, fiebre y dolor de cabeza.
Gastroenteritis. Es una inflamación de la membrana interna del intestino causada por una bacteria que se aloja en el estómago de las palomas, entre otros animales.
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