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Opositores al Puerto de Granadilla aseguran que no existe “ni un solo euro” para financiarlo

   

EUROPA PRESS | SANTA CRUZ DE TENERIFE

El portavoz de Alternativa Sí se Puede por Tenerife, Pedro Fernández Arcila, y el profesor de la ULL del Departamento de Ingeniería Marítima Pedro Anatael Meneses, han declarado este martes en una rueda de prensa que se debe de eliminar la creación del Puerto de Granadilla por sus ilegalidades y por no existir ni un “sólo euro” de subvenciones europeas para financiar este proyecto.

El representante de Sí se Puede señaló que el dictamen del 6 de noviembre que autoriza esta construcción hace referencia a necesidades y a intereses públicos de primer orden, a pesar de suponer “una destrucción ecológica”. Asimismo, otra razón que refleja el dictamen es que “no existe otro lugar en la isla de Tenerife donde se pueda construir un puerto de las características del de Granadilla”, explicó Fernández.

Según Fernández, “otro motivo del dictamen es que el puerto de Santa Cruz se encuentra saturado, con una imposibilidad absoluta de crecimiento y que impediría el desarrollo de la capital, pero en realidad se ha hecho una obra importantísima que ha significado triplicar la capacidad de contenedores del puerto de Santa Cruz, lo que era uno de los principales argumentos para la construcción del puerto de Granadilla”, aclaró el portavoz.

Por su parte, el profesor de la ULL afirmó que con la acción conjunta de todas las fuerzas progresistas pretenden “acabar con esta idea”, ya que “por sus ilegalidades hay motivos para meter a los tribunales, a los asesores y a los responsables políticos de la Comunidad Autónoma de Canarias, entre otros”. Además, recalcó que existen especies protegidas que nunca se pueden ver afectadas por obras portuarias y añadió que según el articulo 20 de la Ley de puertos del Estado, la ejecución del Puerto de Granadilla debe de ser aprobado por el Ministerio de fomento “y aún no se ha hecho”.

Pedro Fernández declaró que las medidas correctoras dicen que como consecuencia de los sebadales existentes no se podrá fondear porque el desgarro producido por las anclas de los buques destruiría esta especie. “Por ello es que un puerto sin zona de fondeo es como un jardín sin flores, no serviría para nada”. Finalmente ambos coinciden en que “se trata de un delito contra el medio ambiente”.