SUSANA NASSER | Santa Cruz de Tenerife
Todo ciclo tiene un fin. Yasmina Hernández se despidió ayer ante diversos medios de comunicación en la Casa de los Capitanes de La Laguna, de una trayectoria profesional marcada por grandes éxitos deportivos que la han consagrado como un icono de la historia femenina del voleibol nacional.
El esfuerzo y sacrificio llevado a cabo a lo largo de su carrera ha supuesto a la tinerfeña de 27 años problemas físicos que le han dejado fuera de las pistas de juego en varias ocasiones y de esta forma, han sellado el adiós definitivo a la competición.
“En el 2006 tuve una lesión fuerte de tobillo, pasé por tres operaciones y el año pasado también me operé de la rodilla de la misma pierna”, explicó Yasmina, “Puse en la balanza aguantar así dos o tres años más o retirarme en el nivel que me encuentro ahora. Al final he decidido dejarlo porque no quiero arrastrarme por las canchas”, señaló.
Su inicios en el mundo del voleibol surgieron de la mano del “querer hacer deporte como cualquier joven de mi edad en ese momento”, aunque sus hermanas también tuvieron que ver ya que “practicaban esta disciplina e iba a verlas jugar”.
De esta forma se colgó el número 8 en la dorsal de su camiseta, que la acompañaría durante su recorrido hasta el final. “Fue el primer número que me dieron en el Construcciones Marichal; me lo asignaron por ser la más joven y le cogí cariño, así que seguí con él”. Posteriormente marcaría una carrera deportiva que siempre fue “muy positiva a pesar de las lesiones”, aseguró la jugadora.
La deportista de la localidad de Tejina ha disfrutado de momentos muy especiales, y amargas tristezas. Su mejor momento ha sido la destacada ”clasificación para la Final Four con el Construcciones Marichal y el Europeo que disputé con la selección en Polonia, donde quedamos novenas”. Este logro generó en la tinerfeña “mucha emoción porque son sensaciones que se te quedan ahí para toda la vida”. Por desgracia, el motivo de su retirada llegó en 2006, “el año en el que me lesioné; marcó mucho mi trayectoria deportiva”.
A pesar de ello, existe un enorme positivismo que envuelve las palabras de la joven chicharrera. “Cogí otro camino, que es el más doloroso, pero también es el más positivo porque gracias a él soy lo que soy ahora”. La relación con su implicación plena al voleibol ha sido dura para Yasmina “ya que se sacrificas estudios, y es entonces cuando te das cuenta de que no todo es el deporte de alto nivel; cuando se acaba tienes que tener otra parcela ahí y me ayudó a ver esa otra vida y a planificarla para cuando este momento llegara”.
A pesar de anunciar su retirada, la deportista mantendrá un vínculo con el voleibol de cara al futuro. “Tengo otro objetivo laboral que me ilusiona, como es la docencia ya que terminé la carrera de magisterio, estoy muy contenta. Voy a ser maestra de voleibol. Creo que puede ser mi oportunidad para transmitir todo lo que he aprendido durante los años que he estado en activo, siempre he querido hacer este proyecto y lo voy a hacer en Tejina que es mi pueblo”.
En este sentido, Hernández tratará de que los niños “vean esto como un ámbito más de su vida, de una trayectoria que los va a formar y que lo disfruten. Es una etapa formativa que ellos van a tener aparte del voley y del instituto, y que como tal, lo tienen que aprovechar y disfrutar al máximo”.
El cariño y apoyo de las personas ha sido uno de los pilares que ha mantenido la sonrisa de esta joven a lo largo de su etapa deportiva . “Ver el pabellón lleno y el cariño de la gente es el resumen de toda la trayectoria recorrida. Estoy muy agradecida a toda la gente que me ha apoyado, a mi familia y a mi pareja”.
La jugadora quiso resaltar la aportación de todos los equipos en los que ha militado. “Todos han sido muy especiales, me han aportado muchísimas cosas positivas y para mí ha sido un honor. Lo que más me ha significado ha sido formar parte de la selección nacional”.
Además, “aunque la práctica deportiva profesional ha terminado para mí, no cierro las puertas a otras especialidades como el voley-playa, que requiere menos impacto competicional”, dijo la ya exjugadora abriendo paso a la historia que siempre la recordará.
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Un palmarés auténticamente envidiable
Yasmina Hernández debutó en la Superliga Femenina en el año 1998, con el CV Tenerife, equipo con el que participó hasta la temporada 2002/03, sumando cuatro campeonatos de Superliga Femenina, una Supercopa y cinco Copas de la Reina con el combinado blanquiazul.
Además formó parte de las plantillas que lograron un cuarto y un tercer puesto en la Final a Cuatro de la Indesit European Champions League, en Bérgamo (1999) y Estambul (2001), respectivamente. También militó en el CV Benidorm en la temporada 2003/04; el CV Aguere en las temporadas 2004/05 y 2005/06; en el CV Universitat de Valencia y CV Albacete en la temporada 2006/07; el CV Diego Porcelos (Universidad de Burgos) en la temporada 2007/08. Regresó al Tenerife en la temporada 2008/09, equipo con el que ganó la Supercopa de España, y se convirtió en la MVP del torneo.
En las temporadas 2009/10 y 2010/11 volvía al Aguere, con el que se proclamó campeona de la Superliga Femenina 2009-2010. Fue Internacional con la selección en 2002 y ha vestido la roja en más de 80 partidos, destacando los Europeos de Croacia en 2005 y Polonia en 2009.
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