NORBERTO CHIJEB | LA LAGUNA
Ni la pertinaz lluvia ni mucho menos la amenaza que se cierne sobre sus hábitos de vida en el barrio pudo ayer con la romerÃa de Los BaldÃos, una de las de mayor tradición en La Laguna, porque, según cuentan algunos de sus vecinos, los más longevos, llevan más de cincuenta años sacando cada septiembre a san Francisco de Paula y a la virgen de La Milagrosa, tal y como volvieron a repetir ayer ante medio millar de personas que acudió a vivir el dÃa de las tradiciones en el granero lagunero y a reivindicar su modo de vida.
Una romerÃa modesta, como son las personas que habitan un barrio que vive de la agricultura y la ganaderÃa, y que ayer pusieron de manifiesto en un corto tránsito entre la plaza de San Francisco de Paula y La Somada, con cuatro carrozas, muchos tractores, algunos grupos musicales de otros barrios laguneros y todo regado por buen vino -pero escaso, según los asistentes-, carne de cochino y una gran paella con la que la comisión de fiestas, que preside Carmelo Real Padrón, obsequió a todos los asistentes, que esperó cerca de la plaza al comienzo de la verbena, con el grupo Guarazón. El párroco ElÃas DÃaz Lorenzo bendijo las imágenes, mientras que el concejal Antonio Pérez Godiño representó al Ayuntamiento, en unas fiestas que hoy concluirán con un festival infantil y la quema del Haragán.