J. F. JURADO | La Laguna
El alcalde de San Cristóbal de La Laguna es, en estos momentos, tan poco optimista respecto al futuro como la mayoría de los españoles. Repasa con satisfacción meridiana sus 100 primeros días de mandato. Pero todo cambia cuando toca hablar de la crisis, el desempleo y las elecciones generales del 20-N. A Fernando Clavijo (CC) no le gusta nada lo que apuntan los sondeos: “La mayoría absoluta de Rajoy no sería una buena noticia para el estado del bienestar, ni tampoco para Canarias”, dice.
-¿Qué balance hace de estos primeros tres meses de gobierno junto a los socialistas?
“Ha sido un comienzo de mandato intenso, con muchos calderos al fuego. Sin duda, poder desatascar Las Chumberas ha sido lo más importante. Hay afinidad con el PSOE, Javier Abreu y yo siempre hemos tenido una buena relación personal. Además, en la política municipal hay muy poco margen para las ideologías”.
-Además de cargo público, usted es economista. ¿Cómo cree que va a terminar de evolucionar la crisis?
“Está claro que las nuevas generaciones van a vivir peor que sus padres. Creíamos que los duros eran a cuatro pesetas y la burbuja finalmente ha explotado. Ahora, lo que hay es una histeria colectiva, de la que todo el mundo responsabiliza a los mercados. Pero aquí la culpa ha sido de todos. Nos hemos gastado lo que no teníamos”.
-Todo apunta a que el próximo año habrá una subida de impuesto en La Laguna…
“Está claro que tendremos que subir la recaudación y bajar los gastos. Habrá una merma importante en cuanto a las transferencias procedentes del Estado, se estima que en torno a los seis o siete millones de euros al año. A eso hay que unir la modificación express de la Constitución, por la cual los ayuntamientos no van a poder tener déficits. Entonces, nos cargamos el estado del bienestar o buscamos vías para subir los ingresos, lo cual solo es posible a través de la modificación de los precios públicos o tocando algún impuesto. Nosotros estamos por debajo de la presión fiscal de los municipios canarios y creo que va a ser inevitable que toquemos algún impuesto. Pero aún no sabemos cuáles, ya que estamos en fase de estudio”.
-¿Habrá también recortes dirigidos al personal municipal?
“Los recortes que ha habido los ha marcado el Estado. Con los funcionarios hemos marcado una hoja de ruta y, ahora mismo, estamos revisando lo que son las ayudas sociales, cuestiones que hasta ahora hemos visto con normalidad y que han dejado de serlas. Pero, a nivel retributivo, para 2012 no está previsto tocar nada. Otra cosa es que, luego, el Estado ordene alguna modificación a través de decreto. En ese caso cumpliremos como siempre lo hemos hecho. Este Ayuntamiento ha sido siempre muy comedido en su política de personal. Lo que pagamos actualmente en nóminas significa un 35% del presupuesto municipal, mientras que la mayoría de los ayuntamientos que han entrado en colapso tenían más del 65% comprometido”.
-Y por parte de la clase política municipal, ¿está previsto algún gesto de ahorro como el que ha anunciado esta semana el Gobierno de Cataluña, renunciando a su paga extra de Navidad?
“Durante cuatro años, no solo no nos hemos tocado el sueldo, sino que nos lo hemos bajado. Eso sí, si es necesario se hará. Todos estamos en la misma lucha. Habría que ver qué ha ocurrido en Cataluña en los últimos años y cómo han llegado a esa situación. Lo que no podemos hacer es equiparar a todos por igual. Es como cuando hablamos del nivel de endeudamiento de los ayuntamientos. Ahí tenemos el ejemplo de algunos, curiosamente gobernados por el PP, como el de Madrid, que se han tirado a la piscina y se han pasado tres pueblos, con más de 70 millones de euros de deuda, y a los que, sin embargo, miden exactamente igual que a nosotros, que no tenemos ni el 50% del nivel de deuda permitido. ¿A quién estamos premiando con esa política? Pues al irresponsable. Al caradura”.
-¿Cree que será sostenible a medio-largo plazo el mapa municipal de la Isla?
“¿Qué haríamos en el caso de suprimir ayuntamientos? Empieza por decirme cuántos y cuáles. Y luego que me digan qué hacemos con el personal. Hay políticas que se deberían promover más, como ahondar en la productividad del empleado público. De lo que se trata es de trabajar más y mejor y que esa actividad se traslade a la sociedad y la dinamice”.
-¿Cambiarán las cosas tras las próximas elecciones del 20 noviembre?
“Creo que no van a cambiar nada. Posiblemente, vayan a peor. El Partido Popular hará lo que ya está haciendo en todas las comunidades autónomas en las que gobierna. Dará un tijeretazo importante al gasto público; dirán que la culpa es de los socialistas; y vendrá más paro y al final entraremos en colapso. El 2012 será completamente terrorífico. Y para las corporaciones locales, peor. Habrá que meterse en la trinchera y aguantar. Pero ahí estaremos, dando siempre la cara por los ciudadanos”.
-Entonces, la hipotética mayoría absoluta de Mariano Rajoy le parecerá el peor de los augurios…
“Creo que no sería una buena noticia para el estado del bienestar, ni sería una buena noticia para Canarias”.
-En ese caso, el gran pacto de CC y PSOE en el Archipiélago, ¿también correría peligro?
“En mi caso, en La Laguna, fuimos los últimos en firmar un pacto, lo trabajamos muy bien, y la intención es que sea para cuatro años. Si no hay deslealtades ni traiciones, yo voy a mantener mi palabra como siempre lo he hecho. Sea Rajoy o Rubalcaba el próximo presidente, políticamente no me va a condicionar en La Laguna”.
-¿Por qué se ha retrasado tanto la designación de los candidatos de CC a las próximas elecciones generales?
“Hace solo unos días que cerramos el acuerdo con Nueva Canarias para acudir juntos a las elecciones y es, ahora, cuando toca decidir los candidatos. Tradicionalmente, en cualquier caso, solemos ser los últimos”.
-¿Daría usted continuidad a Ana Oramas?
“Obviamente. Por su valoración, por su conocimiento y, sobre todo, por el trabajo realizado. Ha sido la voz de Canarias en Madrid. De toda Canarias. De los empresarios, de los plataneros, del sector del turismo, del plátano… Es la única que ha hablado de Canarias en el Congreso en esta legislatura”.
-¿Qué balance hace de la etapa que termina de Zapatero?
“Llegó contra todo pronóstico, pero en un momento dramático, tras un enorme atentando. Consiguió ilusionar en los primeros años. Pero, al final, su aislamiento, su miopía y los disparates económicos le han pasado factura. Deja al país muy tocado”.
-¿Ha incumplido el presidente no firmando el acuerdo plurianual de Las Chumberas?
“No cumplió su palabra, pero entiendo que un gobierno que se va no puede dejar hipotecados los presupuestos de los siguientes nueve años. Lo que ha hecho es comprometerse a poner una primera partida de 15 millones, gracias en gran medida a la presión ejercida por los vecinos. Esperamos que se firme en breve. Luego, habrá que negociar con el nuevo ejecutivo el resto de la financiación. Nos da esperanza y tranquilidad el compromiso del Partido Popular, en el caso de que accedan próximamente al gobierno”.
-Cien días de Gobierno y 1.300 más por delante hasta las próximas elecciones. ¿Cuál es su gran proyecto de mandato?
“Las Chumberas, el Mercado, la rehabilitación de cinco mil viviendas en todo el municipio, los centros ciudadanos de San Miguel de Geneto y Las Canteras, pero, sobre todo, las personas y el empleo. El empleo en mayúsculas. No tenemos competencias en esta materia, pero sí podemos dinamizar y crear las condiciones para que haya actividad comercial y empresarial”.
-¿Está respondiendo el sector privado?
“Está respondido. El Foro Anticrisis ha sido fundamental para que todos, vecinos, políticos y empresarios, nos sentemos en la misma mesa. E intentamos pensar en grupo y cerrar avances. Y solo en septiembre, el paro ha bajado en el municipio en 185 personas y han subido en 95 los trabajos fijos”.
-¿Le interesa a La Laguna la declaración de municipio turístico, tal y como ha hecho Santa Cruz?
“Nos interesa más que la Semana Santa lagunera se declare de interés turístico. Crear una marca propia. Ya somos Patrimonio de la Humanidad, ya somos turísticos. Sinceramente, nos interesa más fortalecer la Semana Santa”.
-El ambicioso proyecto de convertir la antigua iglesia de San Agustín en un gran espacio multifuncional, ¿es asumible en estos momentos?
“Proyectos como el de San Agustín tendrán que esperar. Son ocho millones de euros, mucho dinero ahora que La Laguna no puede afrontar en solitario. Antes tenemos que terminar otros proyectos importantes de rehabilitación, como el convento Santo Domingo”.
-¿Tendrá un nuevo uso la antigua estación de San Benito o, finalmente, será demolida?
“En principio estamos utilizando ese espacio como zona de aparcamientos y está funcionando bastante bien. Ahora estamos estudiando las posibilidades que nos ofrece el inmueble. Ya está desafectado, ya que el suelo era municipal y el edificio era del Gobierno de Canarias. La idea, en principio, es destinarlo a algún servicio municipal”.