JOSÉ LUIS CÁMARA PINEDA | Santa Cruz de Tenerife
Médico, político y diplomático. Carlos Pita Alvariza realiza su primera visita oficial a Canarias como embajador uruguayo en España, cargo al que accedió hace apenas un año después de una dilatada trayectoria política en su país. Impulsor del voto de los uruguayos en el exterior, a través del voto consular, Pita anima a los trabajadores y empresarios canarios a invertir en un país que, según él, disfruta de un periodo de bonanza económica que lo ha situado a la cabeza del continente americano. DIARIO DE AVISOS ha podido dialogar con él en medio de una apretada agenda de trabajo, que incluye, entre otras, la visita al Parlamento de Canarias y diversas reuniones con las cámaras de comercio de las Islas.
-¿Cuál es el motivo de su visita al Archipiélago?
“Nosotros tenemos con Canarias una deuda histórica, porque somos un país que se hizo a partir de canarios y canarias. Es una deuda de sangre. Con el tiempo, Uruguay también fue poblándose con migraciones del norte de España, pero la primer gran migración fundacional fue canaria. La gratitud es inmensa, y el compromiso con esta región es muy grande. En el bicentenario de Uruguay, que estamos celebrando en este 2011, mi función como embajador es ratificar todas esas relaciones históricas y actuales con Canarias y fortalecerlas”.
-¿En qué medida se pueden mejorar y desarrollar esas relaciones? ¿En qué ámbitos concretos?
“Uruguay tiene todo un mundo de oportunidades de negocio para los empresarios canarios, no solo en el área turística, sino también en otras áreas productivas. Por ejemplo, queremos estudiar la posibilidad de que haya emprendimientos comunes en el sector vitivinícola, porque admiramos a Canarias en ese sentido, y queremos aprender y que nos ayuden, inlcuso en otros campos, como el de la energía, la logística…”
-En la misma medida que hace un siglo hubo una importante emigración canaria hacia América, en los últimos años se ha dado el fenómeno a la inversa, y actualmente hay muchos uruguayos en España y la Comunidad Autónoma de Canarias, que han contribuido al desarrollo de nuestro país…
“Cierto. Sin embargo, de nuevo estamos asistiendo a otro fenómeno de repatriación de compatriotas. Uruguay ha venido creciendo de manera sostenida entre el 6 y el 8% anual, y hay una necesidad de mano de obra calificada. Este proceso ha hecho que, voluntariamente, desde hace dos años, nos hemos convertido en un país de inmigración, no solo de uruguayos que retornan, sino también de personas que vienen desde distintos lugares del mundo. Nos encantaría que todos pudieran estar en el territorio nacional, pero nosotros tenemos una política de Estado a partir de la cual entendemos que Uruguay no es solo la gente que está en el territorio y fuera de él, y son tan uruguayos los que están en Canarias, Galicia o Cataluña como los que viven en Boston, Sidney o Buenos Aires. Uruguayos todos, estemos donde estemos”.
-Y en España, en general, y Canarias, en particular, hay una comunidad uruguaya que es muy importante…
“Sin duda. Tenemos contabilizados unos 85.000 uruguayos en España, de los que cerca de 13.000 están en Canarias. En Tenerife es donde reside la comunidad más amplia, unos 6.000, especialmente en el Sur de la Isla. Pero no olvidemos que la mayoría de los uruguayos son descendientes de españoles, llevan ya muchos años viviendo en España e incluso han adoptado la nacionalidad española. Por eso, apenas van ya por el consulado y no los podemos contabilizar y no sabemos si siguen estando aquí o no. La emigración uruguaya a España es la segunda, por detrás de la que va a Argentina”.
-Y en Uruguay también hay un número muy amplio de canarios, ¿no es así?
“Sí, pero no los tenemos contabilizados. Pero puedo decir un dato que es impactante: entre las décadas de los 50 y los 60, tuvimos más del 10% del total de la población nacida en España. El Uruguay, en su origen constitutivo, sus pobladores y primeros habitantes fueron canarios. Después vinieron las oleadas migratorias sucesivas, en las que además de canarios llegaron de otros puntos de España”.
– Desde Sudamérica, donde se puede decir que son especialistas en crisis, ¿cómo se valora la actual recesión que padece Europa?
“Nosotros sufrimos una crisis tremenda a principios del siglo XXI. Somos un país históricamente muy desarrollado, con uno de los sistemas políticos más estables del mundo y con sistema de partidos que es de los más antiguos. Y nos sentimos orgullosos de nuestra estabilidad y nuestra democracia. Sin embargo, tuvimos una gigantesca crisis de la que creemos haber aprendido, que logramos dejar atrás y que no olvidamos. No somos quienes para dar consejos a nadie, pero sí tenemos claro que de esta crisis solo se sale unidos, con fe y garra. Las nuevas generaciones tienen que acompañar a las veteranas, escucharlas y tratar de unirse para salir adelante. Eso fue lo que pasó en Uruguay; cuando todo estaba oscuro, porque nos cayó la tormenta perfecta y no se veía la luz al final del túnel, la gente se unió y se salió adelante. Y España, con el capital humano, la formación y experiencia de su gente, y con el parque industrial y los sectores económicos que posee, seguro lo va a hacer bien”.
– ¿Puede ser, por tanto, Uruguay, una alternativa real de negocio para los empresarios canarios?
“Por supuesto. Hay todas las oportunidades del mundo. En el área de servicios, del turismo, de la energía, las infraestructuras, el transporte, las tecnologías de la información, investigación, etc. Nada de lo que hoy en día hace Uruguay se hace pensando en el mercado local, sino en el mundo. De hecho, las inversiones externas en los últimos 8 años han sido enormes, y las españolas han sido importantísimas. Pero estamos seguros de que hay una nueva generación de inversiones españolas que ya empezó, y que también están aprovechando los canarios”.
– ¿Y puede ser también una salida para ese capital humano que está en situación de desempleo en las Islas?
“En algunos sectores sí puede ser una salida, especialmente para los trabajadores cualificados. Y también, por ejemplo, en la construcción, porque es una de las áreas en las que padecemos un mayor déficit de capital humano. El problema está en que las migraciones regionales también miran hacia otros países de la zona que están en un buen momento y pagan muy bien, como Argentina, Chile o Brasil”.
– Esa comunicación fluida con Canarias, ¿se articulará en más visitas y acuerdos bilaterales con el Gobierno regional y otras instituciones?
“Sin duda. Para eso estamos aquí, para lograr que esos lazos intensos, lo sean aún más. Hablaremos con empresarios, con la Cámara de Comercio y con el Gobierno para explicarles lo que nosotros consideramos que es una opción muy linda, para que vayan y vean las oportunidades que nosotros les sugerimos”.