ENTRE RISAS >

“Algunos diablos se creen dioses y no son ni hombres”

Iñaki Gabilondo, durante la entrevista concedida a DIARIO DE AVISOS. / DA

DOMINGO NEGRÍN MORENO | SANTA CRUZ DE TENERIFE

En el oficio de contar las cosas, Iñaki Gabilondo ejerce de maestro de ceremonias. Horas antes de participar en el ciclo La condición humana, organizado por la Obra Social y Cultural de CajaCanarias, el legendario periodista concedió esta distendida entrevista.

-¿Qué fue de su agria polémica con José María Aznar?

[Risas] “Pues, no ha habido ulterior contacto. No sé si lo habrá. Ojalá”.

-¿Se arrepiente acaso de no haber sido más contundente?

“No, no… Yo no me arrepiento de haber sido más o menos contundente. De lo que sí me he arrepentido es de la ira que en algún momento se apoderó de mí en el caso de la guerra de Irak. Fui muy crítico, como creo que se merecía. No modifico mis puntos de vista, pero sí pido disculpas, y lo he hecho varias veces, por la ira con la que me empleé en aquellos días”.

-¿Qué calva es más brillante, la de Rubalcaba o la de Rajoy?

“Bueno, más grande es la de Rubalcaba. Y más brillante, no sé, no las he visto con esa mirada. Como Rajoy es el gran favorito en todas las encuestas, ya le está aureolando una especie de carisma que se le va creando en su entorno”.

-¿Cómo se manifiesta el carisma?

“El carisma yo creo que es la mirada de los demás, el reconocimiento de otros. El poder tiene un carisma automático. Quien se instale en él queda automáticamente iluminado por esa mirada de los demás. Y a Rajoy ya le noto unas lucecitas”.

-El romanticismo está en decadencia. ¿Se ha impuesto el periodismo pornográfico?

“Algún periodismo no merece llamarse ni siquiera periodismo. Uno es pornográfico, otro es venenoso… Hay distintos modelos bastante tóxicos. Por fortuna, hay otros muchos que no lo son”
.
-A unos periodistas se les ve el plumero. Y a otros la billetera, ¿no?

“Bueno, que se le vea a un periodista el plumero no tiene nada de particular. Algunos entienden que es un pecado periodístico tener una posición ideológica concreta. Que se le vea a un periodista el plumero ideológico no es malo, porque es un ser humano como los demás. Que se le vea la billetera ya es peor, claro”.

-¿La radio es más visual que la televisión?

“La radio es más calidad, más verdad. La televisión tiene demasiada parafernalia teatral”.

-Mucho teatro…

“Sí, sí… Mira, como salgas dando la noticia del fin del mundo, que te ha contado Dios a ti solo, y aparezcas con la corbata torcida en la televisión, la gente se fija en la corbata torcida”.

-¿En esta profesión hay muchos dioses?

“Bueno…”

-O diablos que se creen dioses…

“Sí, eso sí. Puede que haya muchos que se crean dioses. Para empezar, el que se cree Dios no es ni hombre”.

-¿Le entristece que Cuatro haya entrado en el circo?

“Te voy a decir una respuesta corta: sí”.

-¿La razón es una cicatriz en el rostro de..?

“No entiendo la pregunta”.

-Yo tampoco. ¿Qué es la razón?

“¿La razón? ¿Te refieres a la razón? [Se toca la cabeza]. La razón es, como todo, un misterio”.

-¿Hay muchos trileros de la verdad?

“Y muchos supervivientes y muchos sinvergüenzas y mucha gente decente. Lo más difícil es distinguirlos. Lo que sería maravilloso es que unos fueran de color verde, otros anaranjados, otros blancos y otros azules. El problema es que son iguales. Todo el mundo se disfraza de lo mismo”.

-¿El sentido del humor es un antídoto contra la soberbia?

“Desde luego que sí. Si el humor es verdaderamente humor, nos acercamos a lo mucho y poco que somos”.