VERÓNICA MARTÍN | Santa Cruz de Tenerife
Luis González de Vallejo es uno de esos científicos canarios que ha desarrollado toda su carrera en universidades de fuera. Es asesor de Naciones Unidas (Undro) en riesgos geológicos y catedrático de Ingeniería Geológica de la Universidad Complutense. Sin embargo, no ha abandonado su tierra y sigue muy de cerca la crisis volcánica que vive El Hierro en estos momentos. “Esta crisis es una enseñanza de que hay que mejorar la vigilancia, la coordinación y la investigación volcánica en las Islas”. Este es su análisis. Insiste en que las medidas de Protección Civil no son cuestionables. Pese a que dice que solo pone notas en a sus alumnos, por sus palabras, se desprende que la actuación en El Hierro no tendría un sobresaliente.
“Después del análisis de la situación, hay que aportar una valoración desde el lado de la ciencia para orientar a las personas que dirigen este asunto, en este caso del Gobierno de Canarias, para que mejore el sistema porque las erupciones volcánicas han estado presente en la historia de Canarias y van a seguir estando”, asegura y recuerda que es muy probable que todos los canarios vean, a lo largo de su vida, al menos, una erupción. “Por ello, tenemos que minimizar los riesgos para la población, con prevención y predicción”.
El catedrático de la Universidad Complutense de Madrid asegura que “es necesario un serio compromiso del Ejecutivo canario para asumir esta particularidad y no dejarlo todo en manos exclusivas del Estado pues tenemos más interés los canarios en controlar esto porque es un riesgo propio”. En este sentido, apuesta por concentrar todos los medios de investigación, divulgación y prevención del riesgo en un gran centro que sea puntero a imagen del Instituto de Astrofísica de Canarias. “Lo importante es que no dependamos exclusivamente de otros porque pueden darse circunstancias que nos afecten negativamente”. Su apuesta es incrementar el compromiso por el impulso del Instituto Vulcanológico de Canarias (Involcan), “o el organismo que quieran crear” porque, en este sentido, “ha habido dejadez”.
“El ejemplo de El Hierro es un aviso serio de que este fenómeno no es una anécdota. Si estamos preparados, con el próximo que venga tendremos más tranquilidad para afrontarlo”, afirma Vallejo.
Con respecto al control científico de la crisis, el catedrático critica algunas decisiones. “Me sorprende y me entristece que en el comité científico no estuviera ni el Pevolca ni ningún instituto canario, me parece despectivo. Podríamos contar más de 40 personas expertas en estos asuntos en las dos universidades canarias, el Consejo Insular de Aguas, el Iter… y ninguna de estas instituciones han podido estar en la toma de decisiones y eso que llevan años estudiando el asunto. Sus opiniones no han influido para nada. Me parece lamentable y la gente está frustrada… se preguntan ¿para qué valemos?”. El profesor insiste en que el Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha hecho un buen trabajo pero que “la fórmula elegida para afrontar una erupción volcánica es bastante mejorable; no pongo en duda el énfasis y trabajo de los implicados, pero no es suficiente”.