Ashotel no tiene quién la dirija. Desde que hace un par de semanas su presidente, José Fernando Cabrera, anunciara su dimisión, la asociación más importante de la industria turÃstica de Canarias está más sola que nunca. Es incomprensible que nadie, ningún hotelero ni empresario turÃstico, quiera dirigir la patronal más relevante del sector. Es raro, muy raro que no haya tortas por presidir Ashotel. Que no haya empresarios turÃsticos que estén dispuestos a ponerse al frente de una de las asociaciones más importantes de la Isla. Lo dijo Pedro Luis Cobiella, quien fuera durante muchos años presidente de la patronal: dirigir Ashotel es un orgullo. Tiene que ser un empresario de categorÃa y con una fuerte vinculación con la industria turÃstica. Es una pena. Los únicos nombres que saltaron a la palestra, y no porque ellos lo dijeran públicamente, fueron el de Francisco Javier (Fachi) Zamorano y Jorge Marichal. El primero se aburrió. El presidente de CIO y dueño de uno de los hoteles de más renombre internacional de la Isla, como es el BahÃa del Duque, vio a lo que se enfrentaba y decidió autoexcluirse, dejando asà vÃa libre a Marichal, lo que horroriza a algunos empresarios del sector, especialmente por la poca vinculación del mismo con la industria turÃstica y por las pegas legales que tiene uno de sus establecimientos en La Gomera. No quedarÃa bien, vamos. Por ello, muchos creyeron que Zamorano era el hombre perfecto, especialmente por su vinculación con el sector, pero se hartó. Ahora los empresarios del Sur de la Isla están desesperados buscando otro candidato del mismo perfil.
La patronal no quiere dar la imagen de división. Quiere buscar una lista de consenso que aúne los intereses de todos los empresarios. Una lista que estarÃa liderada por Jorge Marichal. Está claro que dos o más candidaturas dejarÃan en evidencia las diferencias de un sector que es clave para la salida de Canarias de la crisis. La pasada semana, precisamente, hubo un encuentro en un conocido hotel del Sur para proponer esta lista, pero al final no hubo acuerdo. El hecho de que en dicho encuentro estuviera no solo el dimitido presidente de Ashotel, José Fernando Cabrera, sino también el actual presidente accidental, Juan Antonio Rosado, enfadó a una parte del sector que no entiende porqué la dirección de la patronal está participando en el proceso de elecciones.
Está claro. Hay espinas en Ashotel y no hay nadie que las saque.