'Entre recuerdos y sueños' consta de nueve obras realizadas en técnica mixta sobre lienzo. / DA
SANTIAGO TOSTE | Santa Cruz de Tenerife
“Un lugar muy común en toda mi obra es la figura de un pequeño bote vacío en medio del mar, un bote que siempre está buscando su puerto. Y hace un tiempo un crítico de Nueva York dijo que esa embarcación era mi alter ego, un inmigrante que siempre navega en busca del origen”. Así presenta el artista peruano Waldo Vinces (Lima, 1967) Entre recuerdos y sueños, la exposición que se inaugura este viernes, a las 20.30 horas, en la galería de arte Millenium, radicada en el municipio norteño de Icod de los Vinos.
La muestra, que podrá visitarse hasta final de mes, en horario de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 20.30 horas, reúne un total de nueve obras de mediano formato, en técnica mixta sobre lienzo, de este artista que un buen día abandonó Perú para instalarse en Argentina, Venezuela, Estados Unidos y, ahora, la localidad de Tacoronte.
“Con Entre recuerdos y sueños -comenta Vinces en una charla con este periódico- prosigo con una línea de investigación estética que inicie hace ya algunos años, donde pretendo unir dos elementos que para mí son muy significativos: la condición de inmigrante, de ese movimiento continuo, de esa búsqueda constante del lugar donde ser feliz, y el propio proceso natural de envejecimiento”. “Tengo 44 años -añade- y, obviamente, ya no soy el mismo que era cuando tenía 22. Y encuentro que ese cambio personal guarda muchas semejanzas con el hecho de emigrar”.
La memoria yuxtapuesta
Waldo Vinces basa su expresión pictórica en la acumulación de capas, de veladuras, de colores, “que se van yuxtaponiendo, del mismo modo que nuestras memorias, nuestros recuerdos más íntimos se van acumulando de forma fragmentaria en nuestra experiencia vital”. “Mi trabajo -argumenta- se nutre de imágenes que vienen de la arquitectura, de la geometría, de las matemáticas; pero también de una imagen mucho más sencilla que me conduce directamente a la infancia: el mar”. “Nací en Lima, una ciudad frente al mar -agrega el artista- y este mismo mar que ahora contemplo desde Tacoronte se convirtió en el primer espejo que tuve”.
En la obra artística más reciente de Waldo Vinces desempeña gran importancia su actual residencia en Canarias. “No descubro nada -explica- al subrayar las relaciones, las similitudes, entre la cultura latinoamericana y la del Archipiélago. Y eso lo descubro a cada momento: en cualquier lugar de Canarias que visite me reencuentro con mis vivencias americanas. Estar aquí es como haber vuelto a casa”.
Las creaciones de Vinces están también caracterizadas por la itinerancia. Por sólo citar algunas, ha desarrollado exposiciones en la Buckhead Gallery, en Atlanta; en el Espacio Arte de Caracas, en Venezuela; o, en la Isla, en el Ámbito Cultural de El Corte Inglés, en Santa Cruz de Tenerife, y la sala de exposiciones de La Caixa, en La Laguna.