M. FRESNO | Santa Cruz de Tenerife
Los agricultores de Canarias se mostraron ayer muy preocupados por las consecuencias de la propuesta de reforma de la Política Agraria Común (PAC), presentada el pasado miércoles por la Comisión Europea, ya que supondrá una rebaja en las ayudas.
El presidente de Asprocan, Francisco Rodríguez, calificó ayer de “auténtico desastre” la reforma porque “no es lo que necesita el sector” ya que supondrá un recorte de las ayudas en casi un 20%. “Estamos en una situación crítica y esto nos viene justo ahora cuando estamos luchando porque se aumente la ficha financiera del Posei”.
La Comisión pretende incentivar las prácticas ecológicas y cambiar el método de reparto de las ayudas en favor de un sistema más equilibrado entre regiones y sectores. Sin embargo, esta propuesta no ha sentado nada bien a un sector que “pasa por una situación muy delicada desde la liberalización del mercado”.
De la misma opinión se mostró el presidente de Asaga, Henry Sicilia, quien dijo estar “preocupado”, aunque confía en que “Europa entienda la necesidad de que Canarias continúe recibiendo estas ayudas porque, entre otras cosas, las razones que dieron lugar a las mismas no han cambiado: el territorio sigue siendo alejado y fragmentado”. “Europa tiene muy claro cual es la situación de Canarias y si no es así”, explicó, “intentaremos que se nos oiga”.
Todavía esta propuesta tiene que ser objeto de negociación y, por lo que se ve, tanto España como Francia e Italia se oponen a la misma. “Ahora somos más en la Unión Europea. Hay menos dinero y países más ricos. Esto lo entendemos, pero espero que Europa también entienda que Canarias tiene unas características especiales que hasta el momento se han recogido”, explicó Francisco Rodríguez.
Rodríguez espera que España “haga algo”. Por lo pronto, la ministra de Medio Ambiente, Rosa Aguilar, aseguró que la propuesta es, “cuanto menos, decepcionante”, lo que la hace merecedora de “casi una enmienda a la totalidad”. No responde a las “necesidades del sector”, puntualizó.
Aguilar explicó que el Gobierno trabaja con las autonomías y con el sector para consensuar una posición común para la próxima reunión del 20 de octubre. Por su parte, los agricultores anunciaron ayer que estudian movilizarse.