Morales vuelve a recurrir

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

Salvador Morales, el condenado a 19 años de cárcel por el asesinato de la que fuera su pareja sentimental Isabel Canino, pretende recurrir al Tribunal Supremo la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) de avalar en su integridad la condena que le fue impuesta por la Audiencia provincial de Santa Cruz de Tenerife.

La decisión de Morales se produce a pesar de que su nuevo abogado, Plácido Peña, ya le ha comunicado que no continuará con el caso ante el Alto Tribunal, aunque sí lo defenderá en el próximo juicio por malos tratos a Canino, que le podría acarrear otra condena privativa de libertad, ésta de tres años de duración.
A este respecto cabe recordar que no es el primer relevo que se produce en la defensa de Morales, ya que el chasnero Peña sustituyó ante el TSJC al lagunero Jesús Arencibia, que lo representó ante la Audiencia provincial.

En principio, los argumentos del anunciado recurso de casación estarían relacionados con los misteriosos restos de ADN hallados en una de las uñas del cadáver de la infortunada, aunque todo dependerá de la decisión que adopte el nuevo letrado, aún por designar. El llamado caso Canino adquirió especial relevancia en los medios de comunicación del Archipiélago por la larga espera a la que estuvieron sometidos familiares y amigos de la víctima desde su desaparición hasta que finalmente fue hallado su cuerpo sin vida.

Fueron 69 largos días los que pasaron desde la mañana en que se vio a la infortunada por última vez (21 de marzo de 2008) hasta que sobre los 18 horas del día 28 de mayo de 2009, la Brigada Provincial de la Policía Judicial y la Policía Científica lograron encontrar la fosa séptica y el cadáver de Isabel Canino.

Durante ese largo intervalo en el que se desconocía la suerte de la mujer, conductora de la empresa de transporte público TITSA, fueron constantes las manifestaciones de familiares, amigos y vecinos, en demanda de respuestas. Para encontrarlas, también se realizaron rastreos en distintas zonas de la Isla, y la foto de Canino se repartió hasta la saciedad.