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Un detenido en el golpe contra la Camorra repite en otra redada

   

T. F. | Santa Cruz de Tenerife

Si la espectacular redada contra la Camorra de hace apenas diez días dejó sin aliento a los canarios en general y a los adejeros en particular, el Cuerpo Nacional de Policía anunció ayer la desmantelación de otro grupo que, presuntamente, explotaba a los trabajadores y falseaba documentos públicos. El hecho de que uno de sus cabecillas ya fuera apresado por la redada del día 19 y la cercanía de ambos operativos son claros indicios de que ambos servicios a la sociedad están relacionados, aunque fuentes oficiales no han confirmado tal extremo.

Sobre el nuevo operativo policial, destacar que fueron efectivos del Grupo de Investigación de Extranjeros, de la Brigada Local de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Local de Sur de Tenerife quienes detuvieron a siete varones de origen marroquí ( B.B. de 28 años de edad, O.M. de 23, M.M. de 27, A.A. de 43, O.B. de 29, B.A. de 33 y A.T. de 26 años) por un presunto delito de falsedad documental y a otro varón nacido en Tenerife, F.N.V.R. de 47 años de edad y empresario del sector de hostelería de Adeje, por el mismo delito y además por otro contra los derechos de los trabajadores.

Precisamente, el comunicado oficial señala hacia el español y a otro marroquí, de 42 años de edad e identificado por las iniciales M.O. como cabecillas de la red. Éste último no pudo ser arrestado… ya que ya estaba encarcelado y sin fianza a cuenta de la redada anterior, conocida policialmente como operación Pozzano. Desde luego, tal circunstancia no impide que se le pueda acusar de estos nuevos cargos.
En cuanto al modus operandi, reseñar que los contratos de trabajo eran facilitados a ciudadanos de nacionalidad marroquí a través de un intermediario del mismo origen, teniendo éstos que pagar por adelantado desde 500 hasta 3.500 euros para obtenerlos. Posteriormente estas personas o no llegaban a realizar el trabajo para el que habían sido contratados.

Algunos de estos extranjeros, al no disponer de dinero para poder pagar los citados contratos, los obtenían trabajando gratis hasta cuatro años para las personas que se los conseguían. Ya con los contratos, podían regularizar su situación administrativa en España, dándose de baja en la Seguridad Social después.