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Las familias de los bomberos muertos piden 20 años para el jefe de guardia en el incendio de Tarragona

   

EUROPA PRESS | Tarragona

Las familias de los bomberos muertos en el incendio de Horta de Sant Joan (Tarragona) en 2009 han pedido 20 años de cárcel por cinco delitos de homicidio imprudente para el jefe de guardia del día de la tragedia, Carles Font (Delta 0).

El abogado de las familias, Pau Simarro, ha confirmado a Europa Press que todas las acusaciones particulares se han puesto de acuerdo para pedir la pena máxima: cuatro años por cada uno de los cinco bomberos muertos en julio de 2009 –aunque en el caso se han personado cuatro de las cinco familias afectadas, piden penas para todos los fallecidos–.

Simarro ha avanzado que, si las familias pueden personarse también en el caso de los dos presuntos pirómanos que provocaron el incendio, pedirán la pena máxima, que corresponde a 20 años para cada uno.

Sin embargo, tras la división del caso en dos –contra Delta 0 y contra los pirómanos–, las familias están a la espera de que la Audiencia de Tarragona se pronuncie sobre el recurso de la Fiscalía precisamente contra la decisión de la juez de Gandesa de dividir el caso.

Recurso de la defensa

También el abogado de Delta 0 ha presentado un recurso que pide la desimputación de su cliente, y se suma a la petición de la Fiscalía.

En el documento al que ha tenido acceso Europa Press, la defensa de Carles Font ha alegado que el único informe pericial -elaborado por los técnicos de la Dirección General de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos de la Generalitat de Cataluña- no le atribuye ninguna responsabilidad por los homicidios.

“Ni hizo nada mal, ni incumplió norma alguna, ni dejó de hacer nada que hubiera debido hacer”, considera el recurso, que recuerda que los peritos fueron incapaces de identificar qué acción concreta hubiera posibilitado evitar las cinco muertes.

El abogado de Delta 0 ha criticado también que se exima de toda responsabilidad por los homicidios a los dos incendiarios, que se les culpe de haber quemado el monte pero no de la muerte de los bomberos: “Con los árboles se establecía nexo casual y de imputación, y con los bomberos no”, alega.

Además, la responsabilidad ante la previsión meteorológica, el incremento de la velocidad del viento, y el aumento y la intensidad de las columnas de humo no son imputables, en su opinión, a Delta 0.

“Nadie estaba en condiciones de verlo en su globalidad y por el cortísimo lapso de tiempo en que todos estos fenómenos convergen”, ha argumentado, y ha añadido que la ubicación de la unidad GRAF-Lleida, de la que formaban parte los bomberos fallecidos, era correcta.

La jueza de Gandesa ha cerrado este mes la instrucción del caso y lo ha desdoblado: por una parte imputa a los dos presuntos causantes del fuego por un delito de incendio forestal, por lo que serán juzgados por un Tribunal del Jurado, y por otro mantiene imputado a Delta 0 por cinco homicidios, lo que deberá pasar por un juzgado de lo penal.

Vista suspendida

Este viernes por la mañana ha tenido lugar en el juzgado de Gandesa –que ahora lleva otro juez– la vista en que las acusaciones y el fiscal debían presentar petición de pena para los dos presuntos pirómanos.

Sin embargo, se ha suspendido porque la defensa de Antonio Paz y Lorenzo Forner ha alegado que las familias de los bomberos muertos no pueden personarse en la parte del caso que atañe sólo al incendio forestal.

Las familias consideran que el incendio sí tuvo repercusión en los bomberos porque murieron en ese fuego, y piden ser parte en el caso, si no como acusación particular, sí como acusación popular –en cualquier caso, los pirómanos no se someterán a jurado popular–.

Ahora el juez deberá tomar una decisión de cara a al próxima vista, que tendrá lugar el viernes 2 diciembre.

En cuanto al fiscal, no ha presentado su acusación a la espera de resolverse el recurso en el caso de Delta 0; tampoco en el caso de los pirómanos, al haberse suspendido la vista de este viernes.