J. M. | Santa Cruz de Tenerife
“Desde hace ya unos años vemos que se recorta el presupuesto para el mantenimiento que Titsa asigna a las estaciones de guaguas”.
Así de contundente se manifestó ayer el presidente del comité de empresa de los trabajadores de la empresa pública de transportes, Virgilio Gómez, al ver lo ocurrido en la madrugada del martes en el hall del Intercambiador de Santa Cruz.
Del mismo modo, el representante de los trabajadores explicó que la compañía dispone de un grupo de operarios de “entre cuatro y cinco personas dedicados al mantenimiento”, aunque matizó que quizás “los trabajadores no estamos capacitados para el tipo de reparaciones” que requiere esta infraestructura.
En este sentido, Gómez recordó que hace ya algunos años se había registrado una caída de estas placas en el Intercambiador, que se había subsanado. El presidente del comité de empresa del sector interurbano de Titsa no quiso aventurarse sobre las posibles causas que provocaron el incidente de ayer. “Nosotros no sabemos nada y no lo sabremos hasta no tener el informe pericial”. Asimismo, matizó que estarán “pendientes a ver qué es lo que ocurre”.
En cuanto a las consecuencias del derrumbe del techo falso y el posterior cierre de parte de la estación, insistió en que se traduce sobre todo en que los vehículos tiene que salir por la parte alta y el cambio de recorrido para el pasaje, pero la intención de la empresa es retomar la normalidad.
Situación “dantesca”
Tras llegar a la estación de guaguas y comprobar el estado de ésta, con los restos del techo completamente esparcidos por el suelo, la primera definición que le vino a la mente fue la de calificar lo sucedido como una situación “dantesca”.
Además, insistió “en que hemos tenido suerte de que lo sucedido no haya cogido a nadie , ya que el derrumbe se produjo de madrugada, así que al menos, esto es la parte más positiva de lo sucedido”, apuntó por último, el representante sindical.