
AGUSTÍN M. GONZÁLEZ | Santa Cruz de Tenerife
Estudió Turismo y se especializó en análisis de situación de mercados. A sus 49 años atesora una gran experiencia en este campo y en el mundo de la comunicación. Ha dirigido empresas turísticas internacionales, ha sido profesor adjunto en la Universidad de La Habana; editor de revista, director de una emisora de radio, articulista y comentarista de prensa, radio y televisión; representante en infinidad de organismos públicos y sectoriales, exconsejero del Cabildo tinerfeño, expresidente de los Carnavales de Canarias y ponente en jornadas y congresos internacionales. Miguel Ángel González Suárez ha cumplido veinte años en la presidencia del Centro de Iniciativas Turísticas (CIT) de Santa Cruz de Tenerife. Además, también preside la Feciten. Por lo tanto, nadie mejor que él para analizar el presente y el futuro turísticos de la capital tinerfeña.
-El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, ha anunciado que uno de sus grandes objetivos para este mandato es convertir la capital en una ciudad turística. En su opinión, ¿qué debe hacer el Ayuntamiento para conseguirlo?
“Llevamos advirtiendo desde 2002 que la situación turística en Santa Cruz comenzaba a dar síntomas de cansancio. Los siguientes años lo ratificaron y se produjo un importante estancamiento. Pero estamos convencidos, a través de relevantes estudios hechos por nuestra institución, que Santa Cruz debe y puede convertirse en la gran capital turística de Canarias”.
-¿A qué cree que se debió ese estancamiento que menciona?
“Hemos tenido gobernantes de segunda división y ello ha llevado a Santa Cruz ha vivir en una tristeza permanente. Hay que trabajar intensamente para recuperarnos y salir de una compleja situación que produjeron dirigentes mediocres. Hemos perdido más de la mitad de los turistas que nos visitaban diariamente, provenientes de distintos destinos de la Isla y que generaban importantes beneficios en el comercio y los servicios. Las pernoctaciones están estancadas y la ciudad ha diluido su encanto turístico. A los turoperadores no les convence este destino. El Comercio agoniza y hasta los propios residentes se van de compras a otras zonas de la Isla. Nos engatusan diciéndonos que vienen más cruceristas y es verdad, pero, simplemente, se siembra confusión para no contar cuál es el verdadero negocio turístico para la ciudad y en el que no se trabaja”.
-¿Cuál es ese “verdadero negocio” al que se refiere?
“Es prioritario potenciar el turismo, el comercio y los servicios. Hay que diversificar el propio turismo, y en esto podemos tener un largo recorrido, empezando por el desarrollo portuario como verdadera plataforma de expansión. La potenciación del turismo náutico que es un filón sin explotar y allí crear el mejor ocio diurno y nocturno de esta Isla. Todo conjugado con reuniones, congresos y simposium internacionales, presentaciones, ferias, carnavales, espectáculos y mucha cultura. Lo que está claro es que el turismo puede desempeñar un papel esencial en el proceso de recuperación de la ciudad, ya que es el sector que posee una capacidad excepcional de reactivación y un inmenso potencial en términos de creación de empleo.Hay que trabajar en profundidad en una de nuestras asignaturas pendientes: la profesionalización, cualificación y formación, promoviendo la continua mejora profesional. Debemos aplicar, la fórmula del éxito: investigación+desarrollo+innovación. El turismo es, cada vez más, imaginación: nuevos proyectos, nuevos servicios, nuevas tendencias y multitud de campos por explotar, con la calidad como referencia y el objetivo de Santa Cruz turístico. Habrá que crear novedades en la ciudad que sean motores de atracción. Y para todo ello hay que aplicar la simplificación de las normativas y la minoración de sus costes, sobre todo pensando en las pequeñas empresas (el 90%) que son las más penalizadas. No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo”.
-¿Siguen siendo los cruceros una asignatura turística pendiente de Santa Cruz?
“Ya no, afortunadamente, pero para ello hemos recorrido veinte años con un intenso trabajo. Este es el segmento del mercado turístico que ha experimentado mayor crecimiento en los últimos años. Las infraestructuras portuarias desarrolladas para soportar la actividad en general tienen una buena calidad y un alto nivel de cualificación en la prestación de servicios. El elevado desarrollo turístico de las islas permite poner a disposición de los cruceristas una infraestructura de servicios, con altos estándares de calidad. Cuando llegan a puerto, el 80% desean visitar la ciudad y de estos, el 40% realizan algún tipo de compra. El restante 20% prefiere visitar la isla. Según nuestras encuestas los cruceristas en Santa Cruz ven cumplidas sus expectativas y por ello las valoraciones del destino son positivas. Lamentablemente, las compras continúan teniendo poco interés. Por ello habrá que revolucionar el sistema y reinventarlo. El 95% de los cruceristas visitan la ciudad a pie y no existe ninguna duda de los beneficios económicos directos e indirectos que generan estos lujosos hoteles flotantes cada vez que atracan en el puerto capitalino. Pero Santa Cruz debe adaptarse a las nuevas demandas de estos exigentes turistas y sacar mucha más rentabilidad a este gran negocio. Los gastos medios siguen siendo bajos”.