Según la OCU, el 35% de los electrodomésticos ‘baratos’ pueden producir quemaduras y el 14% tiene fallos de seguridad

EFE | Madrid

El 35% de los electrodomésticos “baratos” pueden producir quemaduras y el 14% tiene fallos de seguridad, según el análisis llevado a cabo por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

En el caso de los aparatos comprados en España el fallo de los mismos se eleva hasta el 50%.

Para realizar esta investigación la OCU ha analizado 99 electrodomésticos baratos y 6 electrodomésticos potencialmente atractivos para los niños.

En una nota de prensa, la OCU ha explicado que del total de aparatos investigados (secadores de pelo, tostadores, planchas, freidoras, sandwicheras y minihornos), 20 fueron adquiridos en España, mientras que el resto se compraron en Portugal, Bélgica e Italia.

Los análisis de la OCU han detectado más problemas en los productos que sirven para cocinar.

De hecho, ha reseñado que hay categorías de electrodomésticos en los que ninguno ha superado las pruebas de seguridad, como es el caso de los minihornos baratos.

Tras estas conclusiones la OCU recomienda adquirir electrodomésticos que tengan una marca a quien poder reclamar y que el usuario exija que en el producto aparezca claramente identificado la marca, el modelo, la dirección del fabricante y un teléfono de atención al cliente.

Dentro de esta investigación la OCU también ha analizado electrodomésticos potencialmente atractivos para los niños, como una máquina de algodón de Hello Kitty, un tostador Princess Bob Esponja, una sandwichera Ariete Disney, una heladera Hello Kitty, una chocolatera Ariete Disney y una plancha de pelo Hello Kitty.

Tras examinar estos aparatos, la Unión de Consumidores y Usuarios recomienda no dejar en las manos de un niño este tipo de productos, ya que no se trata de juguetes.

Su apariencia, ha advertido, atrae a los niños a manipularlos como si se tratase juguetes, lo que genera riesgo de que sufran accidentes graves.

Para evitar este peligro, la OCU recomienda elegir aparatos que no tengan colores, luces o sonidos innecesarios para su funcionamiento.
La OCU ha remitido los citados resultados al Instituto Nacional de Consumo, organismo al que ha solicitado más controles de productos para verificar si cumplen la normativa de seguridad eléctrica y normas de seguridad térmica más exigentes.

Además, le ha pedido que no se vendan productos potencialmente peligrosos para los niños con aspecto de juguetes y que se controle la veracidad de las etiquetas que certifican medidas de seguridad.