EUROPA PRESS | SANTA CRUZ DE TENERIFE
El Ayuntamiento de Candelaria (Tenerife) ha lanzado una apuesta decidida por el ahorro energético -el objetivo es reducir el gasto energético un 50%- en el municipio introduciendo cortes programados del alumbrado público entre las 00.00 horas y el amanecer, informó el Consistorio.
Para ello, se han instalado en varias zonas de la Villa temporizadores que reducen a la mitad el número de bombillas activas a partir de esa hora, rebajando de esta forma el gasto energético municipal.
Esta política de eficiencia eléctrica entra en vigor después de que la corporación local lograra con esta técnica, la pasada Navidad, recortar el gasto en iluminación en los pueblos del municipio, lo que ha supuesto, según explica el alcalde, José Gumersindo García Trujillo, “un ahorro considerable a las arcas municipales”.
Así, la implantación de esta medida es posible, como revela el concejal de Obras y Servicios, Ramón Gil, gracias a “la instalación de relojes que permiten hacer cortes programados del 50 por ciento de las bombillas a partir de la medianoche en las vías y espacios municipales”.
Por su parte, los puntos en los que se está trabajando para optimizar el consumo de energía comprenden las zonas de la calle de La Arena, la Plaza de la Basílica, la calle Frailes Dominicos, la Rambla Los Menceyes, Malpaís, Las Cuevecitas y Araya, aunque ahora mismo se están efectuando los estudios necesarios para extender la medida a la práctica totalidad del municipio.
Asimismo, en la carretera TF-28, cuyo alumbrado costea el Ayuntamiento pese a ser una vía del Cabildo de Tenerife, se ha procedido a apagar el alumbrado de manera permanente en aquellos puntos en los que no hay viviendas, manteniéndose activo en los tramos habitados, con paradas de guaguas o cruces peligrosos.
Por otra parte, Gil explicó que la corporación local está “estableciendo contactos con el Cabildo para que sea esa institución la que se haga cargo de la iluminación en las carreteras que son de su competencia”.
Política de austeridad
Dentro de esta política de austeridad, el Ayuntamiento ha comenzado ya a reducir al mínimo el gasto en alquiler de luminarias a terceros con motivo de las celebraciones populares, usando siempre que sea posible el material que tiene en propiedad.
De hecho, el único caso en el que durante las pasadas fiestas navideñas se recurrió a la contratación de iluminación fue el de determinadas zonas de gran impacto comercial, como algunos tramos de la Rambla Los Menceyes y la Avenida Marítima.
Pero tal como asegura el concejal del área, Javier Rivero, éste será el último año en que la corporación asuma todos los costes. “A partir de ahora el Ayuntamiento limitará el gasto en luces festivas a las plazas públicas y zonas de mayor trasiego de los vecinos”, afirma.
La tendencia a partir de ahora será, como explica el alcalde de la Villa, minimizar el impacto económico con “un uso racional de la energía”. “Por lo pronto, estas medidas que hemos empezado a aplicar ya están suponiendo un ahorro importante al municipio”, concluye.