DIARIO DE AVISOS | La Laguna

Las obras de consolidación y mejora de la canalización del barranco de Isogue, a su paso por el centro urbano de Bajamar, estarán concluidas en alrededor de un mes, según anunciaron los concejales laguneros de Obras, Jonathan Domínguez, y de Comercio, Juan Antonio Alonso. Ambos ediles comprobaron esta semana la marcha de la ejecución de este proyecto municipal, tramitado por la vía de emergencia debido a la detección de un posible riesgo de derrumbe de un trayecto de la canalización de dicho barranco, situada justo debajo del pasaje peatonal Los Huaracheros, en plena zona urbana del pueblo bajamarero.

Acompañados por los técnicos municipales y de la empresa responsable de la obra, Domínguez y Alonso fueron informados de las labores de refuerzo y mejora que se están llevando a cabo en la estructura de la canalización del barranco, que corresponde al trayecto que transcurre de manera subterránea por la zona urbana, desde la altura de la TF-13 hasta su desembocadura bajo la avenida del Litoral.

Seguridad

Domínguez resaltó el “calado de esta obra, que conlleva una inversión de 535.583 euros”, así como la “rápida respuesta” dada desde la Corporación municipal una vez detectado el problema, debido al riesgo potencial que tenía para la seguridad de las personas y las edificaciones situadas sobre los márgenes del citado barranco. Precisamente, ya han vuelto a sus hogares las dos familias que, por precaución, hubieron de ser desalojadas desde el primer momento y durante la primera fase de la ejecución de los trabajos.

Durante la reciente visita ambos concejales laguneros departieron con varios vecinos del lugar, que mostraron su satisfacción por la ejecución de este proyecto, que dará tranquilidad al acabar con los problemas que presentaba la infraestructura.

Diagnóstico

En la parte del barranco más afectada los técnicos confirmaron problemas en las viguetas del techo de la canalización, por corrosión en su armadura, así como en un tramo de hormigón armado. También presentaba mal estado de conservación la estructura de una edificación colindante. Para solventar estas deficiencias se demolió la cubierta de un amplio tramo de la canalización, procediendo a su reposición, se ha reforzado toda la estructura y también se han renovado las redes de saneamiento del entorno.

El barranco de Isogue, que arranca a una altura de 600 metros sobre el nivel del mar, tiene una longitud total de 1,6 kilómetros y un trazado sinuoso. La zona objeto de los trabajos es su último tramo, canalizado y rectilíneo, el cual discurre bajo el núcleo urbano de Bajamar.