DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

El economista y doctor en Historia Salvador Miranda propuso este viernes incorporar la Reserva para Inversiones en Canarias (RIC) a los trabajadores por cuenta ajena. “Un particular no tiene opciones de invertir en negocios, pero sí en bonos de los que sacan los organismos públicos para financiar las obras”, argumentó Miranda antes de la presentación de su libro Manual de la RIC 2007-2013 (editorial Tirant lo Blanch) en el salón de actos de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife.

Según su iniciativa, un contribuyente solo tendría que señalar una casilla en el IRPF. “Una inversión de 3.000 euros en bonos equivaldría a una deducción importante en su IRPF”, explicó el experto. “Estamos fomentando el ahorro, la capacidad de generar inversiones en Canarias y socializando un beneficio que hasta ahora parecía que únicamente era para los ricachones. Sería una hucha de la que podrían aprovecharse la Comunidad Autónoma y los cabildos a unos tipos de interés muy inferiores a los del mercado”.

En el contexto de la reforma del Régimen Económico y Fiscal (REF), prevista para 2013, el autor pone de relieve que la normativa del RIC está muy encorsetada. “Hay un miedo atroz a lo que diga Bruselas y no hay razones para ello. Una acción como esta [socializar la RIC] ya no depende de Bruselas, sino del Estado español. Ese ahorro en impuestos sería una cantidad simbólica en los recursos del Estado y la gente de la calle tendría la oportunidad de invertir los fondos del REF”. En su opinión, “las restricciones condicionan extraordinariamente cualquier tipo de inversión”.

Como quiera que la RIC es actualmente un incentivo “muy disminuido”, Salvador Miranda sugirió que regrese a los niveles en los que se desarrolló inicialmente, “con unas reglas muy sencillas que se puedan aplicar sin interpretaciones extrañas”.
Ahora, la legislación establece que la materialización de la inversión “debe estar relacionada con activos de cualquier inversión que necesite una empresa y en la que no esté el suelo, cuyo uso se limita a la industria”. Miranda se refirió, asimismo, a los “serios problemas” de interpretación en la aplicación de la RIC. “Es una norma compleja que fue muy corta en su redacción original y que se ha interpretado de dos formas distintas: de manera amplia por parte de los empresarios y asesores, y de forma muy restrictiva desde la Administración tributaria”.

Después de la aclaración que se hizo el año 2000, “se vio que la RIC no era exactamente lo que decía el texto legal”. El criterio administrativo ha ido prosperando en los tribunales y la reformas integral de 2006 consagró esa tendencia, resumió Salvador Miranda.

En estos momentos, arguyó, “la RIC no es más que el compromiso del empresario para invertir en Canarias”, que desde 2006 “ha descendido a un ritmo alarmante”. De los 2.600 millones en 2006 se ha pasado a 650 millones, ilustró.

A su entender, un menor compromiso de inversión perjudica a la sociedad canaria; “más, en una época en que el paro es nuestro principal problema”. Para remediar esta situación, plantea incrementar el compromiso de los empresarios a través de una RIC “muchísimo más amplia, más flexible y olvidarnos de todas las restricciones con las que empezó la Administración tributaria y sobre las que le han dado la razón los tribunales”.

Salvador Miranda achaca la disminución de los fondos de la RIC a la crisis económica. No obstante, puntualizó, “en Canarias también hay empresas con beneficios” y se preguntó: “¿Por qué les vamos a poner cortapisas para que sigan con ese compromiso de inversión si el Estado no puede invertir porque no se puede endeudar?”.

Más de 200 profesionales y empresarios asistieron este viernes a la disertación de Salvador Miranda sobre la evolución de la RIC, su impacto en el desarrollo económico del Archipiélago y la conflictividad tributaria y jurídica derivada.

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Valverde: “Lo de Canarias es indiscutible”

Como prologuista de su obra Manual de la RIC 2007-2013, Salvador Miranda ha contado con la colaboración de todo un magistrado del Tribunal Supremo, Rafael Fernández Valverde.

Cuestionado tras la presentación del libro por este periódico, Fernández Valverde explicó que, a su juicio, Canarias presenta “una situación que merece una especialización de carácter fiscal mucho más que otros territorios. Por eso llama la atención que ahora se hace un planteamiento a vida o muerte desde el ámbito de Cataluña para firmar un convenio como el de Navarra, cuando las condiciones objetivas más que avaladas son las de aquí. Además, la Constitución las reconoce y Europa también. En este sentido, lo de Canarias es indiscutible”.

En cuanto al tema de la Reserva de Inversiones, el magistrado apuntó que “siempre hay que adaptarse a las circunstancias, y ahora estamos en crisis. ¿Fraude? Es cierto que alguno habrá habido, pero no por eso hay que sacar una interpretación destructiva. En general, el empresario canario ha actuado de buena fe”.

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