Alerta por fuertes vientos > consecuencias en la isla

Candelaria, el municipio más afectado por el temporal de viento

La playa de Punta Larga sufrió graves desperfectos por el fuerte temporal del fin de semana. / DA

N. TORRES / G. GULESSERIAN | Santa Cruz de Tenerife

Los fuertes vientos que azotaron Tenerife este fin de semana dejaron serios destrozos en distintos puntos de la costa. Entre los más afectados está el municipio de Candelaria, que ha sufrido las consecuencias del fuerte oleaje. Los lugares más afectados son San Blas, la piscina municipal y los accesos al mar de la Playa de Punta Larga. El alcalde de Candelaria, José Gumersindo García Trujillo, destacó que la máxima preocupación está en San Blas y su entorno, ya que es una zona que estaba afectada con anterioridad y que sufrió duramente la fuerza del mar.

En lo que respecta a la Piscina Municipal, los destrozos originados por el temporal están siendo evaluados por la Empresa Municipal, pero con casi toda probabilidad estos hechos harán que se demore su apertura de la instalación que estaba prevista para el 1 marzo. Asimismo en la Playa de Punta Larga la acción del mar provocó desperfectos en un lateral de la escollera y movimientos de piedras de grandes dimensiones, por lo que la Oficina Técnica está realizando un informe con los daños ocasionados y se enviarán a la Dirección General de Costas.

Por su parte, el concejal de Obras y Servicios, Ramón Gil Molina, apuntó que el personal de su concejalía lleva trabajando desde el domingo en las zonas afectadas para reparar los desperfectos y se decidió el cierre del acceso a todas las playas del municipio para evitar posibles daños a las personas, ya que se espera que hoy y mañana la incidencia del oleaje sea considerable, aunque en menor medida que el pasado fin de semana.

Norte

En esta vertiente de la Isla, el municipio más afectado por los vientos fue Puerto de la Cruz. Por este motivo, la Policía Local ha limitado hasta mañana el acceso a las zonas costeras, principalmente en el conocido como paseo del muelle, y vigilará los arcos de luces que el Ayuntamiento ha instalado en la vía pública con motivo del Carnaval dado que ello puede representar un peligro para los viandantes. Hasta el momento, sólo se han registrado contenedores tirados y ramas de árboles.

En el resto de municipios, como son La Orotava, Los Realejos y Santa Úrsula, la situación ha sido de relativa calma y no se han registrado incidentes durante el fin de semana aunque también se ha activado la alerta desde el Gobierno de Canarias.

Lo mismo sucedió en la Isla Baja y en la comarca de Acentejo. De hecho, en Garachico, ni siquiera se ha procedido a cerrar al tráfico la avenida Marítima, una de las primeras preventivas que adopta el Ayuntamiento.

No obstante, en el fin de semana los fuertes vientos rompieron algunos de los ventanales de la torre de la parroquia de Santa Ana y la Policía Local decidió cortar por precaución la calle Francisco Montes de Oca y García, donde se encuentra el centro de salud. El Gobierno de Canarias dio ayer por finalizada la situación de alerta por fuertes vientos en el Archipiélago y la rebajó a prealerta.

La normalidad imperó ayer en San Andrés tras un domingo en el que las olas golpearon de nuevo al barrio. / SM

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El mar sigue ‘saltando’ en San Andrés

Una vez más, la avenida marítima de San Andrés se vio anegada por las olas este fin de semana lo que obligó al cierre de la calzada por el embate del mar. Ayer se volvió a la normalidad sin registrarse ningún tipo de incidentes. Desde la Plataforma Vecinal de San Andrés, su portavoz, Beneharo Hernández, considera que este fin de semana se demostró que la solución provisional del espaldón construido recientemente “no está dando resultado; las olas siguen entrando. Si tenemos en cuenta que este temporal fue flojo-continúa Hernández- cuando venga del sur, que es cuando viene con fuerza, volveremos a tener los problemas de siempre”.

Hernández además insistió en el “efecto rampa” que provoca la actual estructura y que hace que el agua entre con más facilidad hasta al paseo. Los vecinos insisten en que el futuro proyecto de escollera en el que está trabajando la Autoridad Portuaria debe ubicarse al menos a 150 metros para que las olas pierdan suficiente fuerza antes de golper contra la costa. “Los actuales 60 metros que están planificados son insuficientes. Si el temporal es fuerte, esa distancia es muy poca para que evite que se produzcan destrozos”, afirmó.

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