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Sanidad se niega a facilitar datos de las listas de espera

J. L. C. | Santa Cruz de Tenerife

Casi mes y medio después de que se recogieran los últimos datos correspondientes a las listas de espera sanitarias en el Archipiélago, la Consejería de Sanidad sigue optando por la ley del silencio, consciente de que será complicado maquillar el notable aumento respecto a lo contabilizado en junio de 2011.

Al respecto, la titular del departamento autonómico, Brígida Mendoza, se limitó a señalar en el pleno del Parlamento que “conforme al Real Decreto 605, los datos se harán públicos según al calendario marcado por el Ministerio de Sanidad”. De este modo, los registros correspondientes al periodo entre junio y diciembre de 2011 tardarán al menos “dos meses en llegar”.

Mendoza respondía así a una pregunta formulada en la Cámara por la popular Teresa Pulido, quien acusó a la consejera de “falta de transparencia”. Pulido, además, criticó al Gobierno de Paulino Rivero por “faltar a la verdad” e incumplir sus promesas, y exigió a la titular de Sanidad que “no engañe” a los ciudadanos, porque se trata de una prestación “básica y esencial” donde no caben “recortes”.

“El señor Rivero se comprometió a dejar la lista de espera quirúrgica en 30 días, algo que será imposible llevar a cabo si se mantiene la supresión de la actividad de tarde en los quirófanos”, recalcó Teresa Pulido.

En la orilla opuesta, Brígida Mendoza dijo que no se ha suprimido ninguna actividad, sino que ha habido algunas “restricciones”, pero “no se ha interrumpido ningún programa”.

Una afirmación que no comparten desde el comité de empresa del Hospital Universitario de Canarias (HUC), donde afirman que “la supresión de las 600 intervenciones que se venían realizando por las tardes en centros como el HUC, ha aumentado considerablemente las listas de espera quirúrgica”.

En UGT y CC.OO. son de la misma opinión, y exponen que “el aumento de la jornada laboral tiene su trampa, y está generando graves repercusiones en los pacientes”. “La gente está muy enfadada porque se está faltando a la verdad, y la situación no puede seguir así”, añaden en el Sindicato Médico en Tenerife.

La propia consejera de Sanidad reconoció el lunes que el aumento de la jornada laboral de 35 a 37,50 horas semanales en la sanidad canaria ha llevado a que el personal sanitario haya disminuido en 470 personas, reducción provocada por la no renovación de los contratos eventuales y de sustituciones.

Por otro lado, y en respuesta a la diputada nacionalista Nuria Herrera, la consejera de Sanidad manifestó que “continuará demandando” al Estado que salde el déficit histórico de financiación que mantiene con las Islas desde 2002, que asciende a más de 1.400 millones de euros.

Nueva financiación

Mendoza aseguró que, en el marco del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, reclamará que se diseñe un “nuevo modelo de financiación” que incluya un subsistema finalista de financiación de la asistencia sanitaria, diferenciado del resto de servicios públicos fundamentales, con actualización anual de las variables y que permita una financiación per cápita ajustada igual para las distintas regiones. Canarias ha venido realizando un “importante esfuerzo presupuestario” para garantizar la cobertura de la asistencia sanitaria y la “mejora continua de la calidad y accesibilidad a las prestaciones”. De hecho, en la actualidad el peso de la Consejería en el presupuesto de la Comunidad Autónoma es del 38,44%, espetó Mendoza, quien concluyó que paliar la deuda histórica con el Archipiélago “es de justicia”.