Europa Press | Bruselas

El ministro del Interior, Jorge Fernández-Díaz, ha pedido hoy a la Unión Europea que el aumento de la presión migratoria en el Mediterráneo central y oriental tras la ‘primavera árabe’ no lleve a descuidar la ayuda, especialmente a través de la Agencia de Control de Fronteras (FRONTEX), para combatir la inmigración irregular a Canarias y el Mediterráneo Oriental.

“Lo que hemos planteado es que la ayuda que entendemos que es precisa por mor de la primavera árabe en el Mediterráneo oriental y el Mediterráneo central no vaya en detrimento de la ayuda que es preciso mantener en el ámbito del Mediterráneo occidental y también de la zona atlántica”, ha explicado Fernández-Díaz en rueda de prensa tras participar en una reunión de ministros del Interior de la UE.

En su opinión, el “descenso de los flujos” de inmigrantes irregulares procedentes de Senegal o de Mauritania hacia las islas Canarias y desde el Mediterráneo occidental a España “no es porque la presión migratoria haya disminuido sino porque el control es en estos momentos mucho más eficaz, fruto de los acuerdos con los países de origen de esos flujos migratorios y también de la ayuda de FRONTEX”.

Durante los debates del Consejo del Interior de la UE, Fernández-Díaz ha defendido además que sean los Estados miembros y no la Comisión los que tengan la última palabra a la hora de reintroducir controles fronterizos en el espacio Schengen en caso de flujos migratorios masivos porque es una decisión que afecta a la “soberanía”.

El ministro del Interior ha abogado por preservar la libre circulación de personas en el espacio Schengen como una “conquista irreversible” de la UE. Para lograrlo, ha dicho que son necesarias “reglas de juego claras” y una mejora de la gobernanza en materia de gestión de fronteras.