“La magia está en que muchos músicos sumen una sola sensibilidad”

SANTIAGO TOSTE | Santa Cruz de Tenerife

"La crisis no debe ser la excusa para restar importancia a la cultura”. / SERGIO MÉNDEZ

Michal Nesterowicz (Wroclaw, Polonia, 1974) será la próxima temporada en el nuevo director titular y artístico de la Orquesta Sinfónica de Tenerife (OST). Apenas unos días después de su llegada a la Isla para una primera toma de contacto, mantuvo esta charla con DIARIO DE AVISOS.

-En su actividad profesional ha tenido la oportunidad de dirigir a múltiples formaciones. ¿Qué es lo más complicado de poner de acuerdo a tantas individualidades en torno a un mismo objetivo?

“El instrumento de un director no son los violines ni los chelos, y tampoco las trompetas o los oboes: son los músicos, gente con diferentes caracteres y emociones y, sobre todo, que atraviesa diferentes momentos en sus vidas. El instante más mágico de una orquesta es cuando ese grupo transmite una misma sensibilidad musical. El director quiere contar una historia, y para eso debe saber conducir a los músicos por los matices y la sensibilidad que hay en una partitura. Eso es fundamental, y muy difícil. Cada orquesta es distinta, con un sonido y una ruta musical diferente. Una orquesta es la suma de pequeños detalles”.

-Viene a la Isla para tomar el relevo del maestro Lü Jia. ¿Qué opinión tiene de su antecesor?

“Conozco su trabajo y me merece gran respeto como artista. No tuve la oportunidad de conocerlo personalmente. Aunque dirijamos a las mismas orquestas, rara vez los directores coincidimos. No puede haber dos sobre un escenario, sólo uno. E incluso para algunos músicos esta cifra es demasiado”.

-Acaba de iniciar un proyecto que nace con el deseo de ser de largo recorrido. ¿En qué momento veremos su impronta en la OST?

“Con cada concierto. Y eso tendrá que ver con el color de las notas, con la interpretación… Se verá desde el principio, y a partir del primer año, de forma más obvia. Emprendo un camino con la orquesta y necesitamos conocernos. Sobre la confección de cada temporada, sobre programas y nuevos ciclos…, prefiero esperar seis o siete semanas antes de entrar en detalles de esto”.

-¿Qué virtudes tiene la OST y qué aspectos cree usted que ha de mejorar?

“Siempre es posible mejorar y trabajar para acercarse a esa hipotética meta que está ante nosotros. Debemos procurar, por ejemplo, atraer más público a los conciertos. Y también crear algo muy especial para el maravilloso edificio del Auditorio de Tenerife: un concepto de programa que sea atractivo para todos. Respeto a los abonados y a quienes acuden a nuestros conciertos de forma habitual. Pero también creo que en Tenerife hay gente que aún no viene y que podría disfrutar mucho. Hemos de elaborar ciclos que brinden distintas opciones. Y no sólo con la música sinfónica, también buscaré proyectos cruzados con otros tipos de música. En Tenerife, por ejemplo, hay muchos dj’s; ¿por qué no hacer algo juntos? En suma, tengo a mi alcance todo el potencial musical de esta Isla para crear un amplio programa cultural. Y no sólo dentro del Auditorio de Tenerife”.

-La crisis también pasa factura a la cultura. ¿Cómo se puede sacar adelante con pocos recursos un proyecto sin renunciar a la calidad?

“Sí, la crisis está ahí. Pero cuando pasamos un mal momento, la cultura es más importante aún. Recortar cultura es muy peligroso. Con mucho dinero es sencillo hacer programas de calidad, pero ésa no es la cuestión. Con lo que tenemos hay que elaborar programas amplios y diversos. Y después de la crisis, aumentarlos. La crisis no debe ser la excusa para quitarle importancia a la cultura”.