EFE | Barcelona

Una operación conjunta de la Policía Nacional y los Mossos de Esquadra ha permitido desarticular una banda de falsos policías que asaltaba a turistas en carreteras de Barcelona y el área metropolitana, y también cerca de hoteles y aeropuertos.

En sendos comunicados, la Policía Nacional y los Mossos informan hoy de que los miembros del grupo, detenidos el pasado día 1 de este mes en Calella (Barcelona), utilizaban placas de policía y cartones con supuestos distintivos policiales para parar a los turistas y que, con el pretexto de un registro del vehículo y de sus pertenencias, se apoderaban de dinero y otros objetos de valor con gran rapidez.

En total, han sido detenidas trece personas, todas de nacionalidad iraní, a los que se imputan los delitos de usurpación de funciones, lesiones, atentado a agente de la autoridad, falsedad documental y asociación ilícita.

Hasta ahora, se han esclarecido una veintena de asaltos a turistas por parte de este grupo, que podría haber obtenido un botín diario de entre 6.000 y 10.000 euros.

Al parecer, este grupo actuaba con anterioridad en la Comunidad de Madrid, donde se consiguió detener a algunos de los miembros, mientras otros continuaron con sus asaltos en Cataluña.

Para llevar a cabo los robos, los detenidos actuaban en grupos de un mínimo de nueve personas y circulaban en varios vehículos, de segunda mano y gama media pero muy potentes.

Uno de los coches realizaba tareas de vigilancia y alertaba de la presencia policial al resto, a la vez que seleccionaba a las potenciales víctimas.

A los detenidos se les incautaron 30.000 euros en efectivo, diversa documentación falsificada, credenciales policiales falsas, piezas de ropa con la bandera de España, joyas de gran valor y varios vehículos.