EUROPA PRESS | Madrid

La portavoz de Hacienda del PP en el Congreso de los Diputados, Ana Madrazo, ha responsabilizado a los socialistas de la falta de consenso con la que el Pleno de la Cámara Baja aprobará este jueves la Ley de Estabilidad Presupuestaria, acusándoles de “no estar a la altura de los intereses” de España y de ser “irresponsables” e instándoles de nuevo a replantearse su voto en contra.

En declaraciones a Europa Press, la ‘popular’ ha cargado las tintas contra el principal partido de la oposición, protagonista junto con el PP el pasado mes de agosto de la reforma del artículo 135 de la Constitución que ha dado lugar a esta norma, que fija el déficit estructural en el cero por ciento a partir de 2020 y establece una senda de reducción de la deuda pública para reducirla hasta el 60 por ciento en los próximos años.

“El PSOE no tiene demasiado interés en llegar a un acuerdo y nos parece una irresponsabilidad absoluta en la situación que atraviesa la economía. No están a la altura de los intereses de España, que es lo que tratamos de defender”, ha insistido.

La ley respeta el pacto político

Así, ha reiterado que los socialistas “no quieren ayudar a sacar España adelante” ni están “por la labor de llegar a un consenso”, apuntando que “para ponerse de acuerdo hace falta que haya voluntad por las dos partes” y criticando así de las “contradicciones” en las que incurre el PSOE al rechazar una ley que, a su juicio, respeta “estrictamente el acuerdo político” de agosto y el Pacto Fiscal de la UE.

“Nosotros seguiremos intentando llegar a acuerdo hasta el último momento con todos los grupos, incluido el PSOE, pero si no quieren ayudar pues allá su responsabilidad”, ha añadido la diputada, replicando así a la portavoz parlamentaria socialista, Soraya Rodríguez, quien este miércoles ha acusado al Gobierno de no haber planteado ni una sola alternativa sobre la que negociar.

No son prisas, es necesidad

Además, Rodríguez también ha afeado al Gobierno sus “prisas” por presentar a debate la norma en lugar de ampliar los plazos para dar margen al acuerdo, lo que llevará a aprobar la norma sin un gran consenso y, a su vez, anulará los efectos positivos en la confianza y la credibilidad internacional que se pretendían conseguir.

“Ha habido el tiempo suficiente para lograr un acuerdo, ha habido diversas conversaciones con todos los grupos incluido el PSOE. Pero hay una serie de compromisos ineludibles y urgentes, dada la situación que atraviesan los mercados y la coyuntura económica de los últimos días, que ponen de manifiesto con mas virulencia aún la urgencia de la reforma. Tenemos que empezar a poner los cimientos y tenemos que hacerlo ya”, opina Madrazo.

Así, ha insistido en que esta normativa “no es un capricho del PP” ni se aprueba ahora porque al Gobierno le haya entrado prisa. “Es España la que tiene mucha prisa y como tenemos muy claro que el objetivo son España y el interés general pues se ha establecido un calendario que se cumplirá escrupulosamente”, ha añadido.

Medida sine qua non

Por último, la portavoz ‘popular’ de Hacienda ha reiterado que el país tiene unos compromisos con la UE con los que el Ejecutivo está “comprometido” y que debe cumplir”. Y para ello es “un requisito no suficiente pero sí necesario” aprobar una norma que, junto con el resto de reformas estructurales, permitirá a España “demostrar que es capaz de cumplir estrictamente con los deberes que se nos han impuesto”.

De esta manera se podrá “transmitir un mensaje de confianza para que la inversión fluya” y, así, recuperar la “credibilidad ante los mercados y ante Europa” e “iniciar nuevamente la senda del crecimiento económico y de la creación de empleo”. “Son compromisos a los que ni el Gobierno ni el PP van a renunciar porque son ineludibles”, ha concluido.

Así las cosas, se da prácticamente por descontado que los socialistas votarán en contra de la ley que, sin embargo, sí podría contar con el respaldo de otros partidos como UPyD y UPN, que consiguieron ‘colar’ algunas de sus enmiendas (técnicas todas ellas) al texto, así como de CiU, con el que el Gobierno sigue negociando, según ha puntualizado Madrazo.