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La Caixa se da un año para cerrar la integración tecnológica de Banca Cívica y devolver el préstamo público

EUROPA PRESS | Madrid

La Caixa prevé culminar la integración tecnológica de Banca Cívica y devolver el préstamo de dinero público de 977 millones de euros recibidos por ésta última en los próximos doce meses, según avanzó el vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de Caixabank, Juan María Nin.

Nin especificó que la integración tecnológica tras la adquisición de Banca Cívica culminará en abril de 2013, y que la integración de Caja Navarra, Caja Burgos, Cajasol y CajaCanarias devolverá los recursos recibidos a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en esa fecha.

Los expertos consideran un paso fundamental la integración tecnológica de las entidades que se fusionan porque agiliza el ahorro de costes y permite que los clientes puedan ser atendidos en toda la red del grupo con independencia de la entidad a la que pertenecieran.

Los expertos consideran un paso fundamental la integración tecnológica de las entidades que se fusionan porque agiliza el ahorro de costes y permite que los clientes puedan ser atendidos en toda la red del grupo con independencia de la entidad a la que pertenecieran.

Durante su intervención en el XIX Encuentro del Sector Financiero, Nin ha destacado el liderazgo que adquiere CaixaBank al absorber Banca Cívica, pues pasa a ser la primera entidad en nóminas, pensiones, seguros de vida o tarjetas.

Además, ha insistido en que el grupo ha logrado su objetivo de tener un 15 % de cuota en mercado en el negocio minorista, lo que da una base “suficientemente sólida” en ingresos.

En cualquier caso, la integración de Banca Cívica llevará su tiempo y Nin ha explicado que antes de julio-agosto espera que el proceso legal esté cerrado y se comiencen a generar las sinergias de coste.

A cierre de 2014, el banco calcula que el ahorro de costes será de unos 540 millones de euros, lo que permitirá al nuevo grupo alcanzar una eficiencia del 49 %, aunque antes habrá que destinar 1.100 millones para asumir los costes de reestructuración.

Entre esos costes estará el ajuste de plantilla y de la red de sucursales, aunque Nin no ha aportado ningún dato sobre esto y ha incidido en que la integración de Banca Cívica es una “operación natural”.

Ha argumentado también que la absorción ha sido posible porque las dos entidades, CaixaBank y Banca Cívica, cotizan y ello facilitó la valoración, aunque fue necesario una “intensísima” auditoría (due diligence) durante tres semanas.

La nueva CaixaBank nacerá con una morosidad del 5,55 %, lo que le coloca como líder en calidad de la cartera crediticia, que es la “más saneada y con mejor cobertura de todo el sistema financiero español”.

La compra generará valor para el accionista de CaixaBank, ha añadido Nin, aunque la política de dividendo se mantendrá.

El Estado también se beneficiará de la compra porque CaixaBank prevé devolver en un año el préstamo público que pidió Banca Cívica cuando sumó a Cajasol al grupo que formaban inicialmente Caja Navarra, CajaCanarias y Caja de Burgos.

La Caixa ha adquirido Banca Civica sin aportaciones del FROB, organismo dependiente del Banco de España, ni del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que se nutre de las aportaciones privadas de las entidades financieras.

“La operación nos sitúa claramente en el primer puesto del ranking” de la banca, dijo Nin, que intervino en el XIX Encuentro Financiero organizado por ABC y Deloitte e inaugurado por el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez.