NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife no esperará a que el proceso de rehabilitación de la Casa Siliuto, aún en trámite, esté terminado para que el municipio cuente con Casa de la Juventud propia, destino último del inmueble pendiente de restauración. La opción, según confirmó la concejala responsable del Organismo Autónomo de Deportes (OAD), Mónica Molina (PSOE), es instalarla en el mismo inmueble que la Casa de la Juventud Insular, para la que el Cabildo de Tenerife ya está valorando un local situado en el Barranco de Santos. En cuanto a los plazos que se barajan para esta apertura, “es muy difícil de especificar”, matizó Molina, “porque los técnicos aún están analizando si el local reúne las especificaciones concretas que exigen las casas de la Juventud”.
Según explicó la concejal de Deportes, “me he propuesto no esperar a que la Casa Siliuto esté terminada porque, el estado en el que está es muy comprometido, y aunque ya tenemos consignación presupuestaria para la elaboración del proyecto de reforma, aún no tenemos presupuesto para la obra”.
Estatutos
Desde el pasado viernes, el OAD es el responsable de manera formal de Educación y Juventud, ya que en la práctica, Mónica Molina había asumido esas competencias desde su llegada al Ayuntamiento como consejera delegada de ambas áreas. Como ella misma explicó “ni siquiera tenía un espacio físico destinado a estas áreas, ni tampoco personal para llevar a cabo las iniciativas en las que tenemos competencias”. La concejal explicó que quiere darle un “impulso” a Educación y Juventud, prácticamente diluidas dentro de las distintas concejalías: “En Educación tenemos muy pocas competencias y se limitan a la coordinación del Consejo Escolar Municipal, que se reúne cada dos meses, y en los que se analizan los problemas educativos de Infantil y Primaria”.
Molina señala que fundamentalmente se están centrando en actuar sobre el absentismo escolar en estos ciclos. “No sólo obtenemos información sobre las cifras de absentismo sino que también intervenimos con las familias y profesores y elaboramos informes si fuera necesario para remitir al IMAS u otras áreas implicadas”.
El OAD, tras aprobarse en el Consejo Rector, cambiará su nombre por el de Organismo Autónomo de Deportes, Educación y Juventud para reflejar las nuevas competencias que asume formalmente en sus estatutos. Mónica Molina se mostró satisfecha con este nuevo cambio puesto que “evitamos la creación de nuevas concejalías en una situación de crisis como la que atravesamos y conseguimos impulsar dos áreas muy importantes que hasta ahora se habían visto deslocalizadas y de carácter transversal en el Ayuntamiento”.
[apunte]
Juventud
Mónica Molina quiere apostar fuerte por el impulso del área de juventud, donde, como reconoció, “está todo por hacer”. Según detalló Molina, “en breve constituiremos el Consejo Municipal de Juventud, y queremos localizar a todas las asociaciones, muchas de ellas incluso ya desaparecidas, para actualizar el listado de organizaciones”. La responsable de Deportes, Educación y Juventud, reconoció que hasta ahora “los colectivos que se dirigían al Ayuntamiento no sabían muy bien a dónde acudir, con distintas puertas de entrada”. “Ahora -continua- ya tienen un lugar concreto al que dirigirse”. Molina también señaló que la intención es regularizar a todos aquellos colectivos que no se hayan dado de alta como tales: “Los ayudaremos a constituirse formalmente, además de aglutinar la participación juvenil en torno al Organismo Autónomo”.
[/apunte]