DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz
El tinerfeño David Minguillón, a la guitarra; el polaco Mateusz Malcharek, al bajo; el holandés Jeroen Truyen, en la batería, y el alemán Sebastian Fasut, al piano. La cervecería Tacoa, ubicada en el municipio de El Sauzal, se sumará esta noche, a partir de las 21.00 horas, a la conmemoración del Día Internacional del Jazz -una fecha que se celebra en todo el mundo cada 30 de abril, conforme a la iniciativa planteada por el célebre pianista Herbie Hancock- con la actuación Bonobo Jazz Quartet.
La ciudad holandesa de Maastrich fue el lugar donde se gestó este proyecto jazzístico que lidera David Minguillón, lugar donde se estableció el músico portuense tras una formación académica en diversos centros europeos. Allí Minguillón ha mantenido contacto con los más importantes maestros, y también, con sus alumnos, de la denominada escuela holandesa.
Aprendizaje y trayectoria
David Minguillón inició sus estudios musicales de piano y solfeo a los 12 años, para adentrarse a los 17 en el mundo de la guitarra moderna. Un año más después comenzó con la guitarra clásica. El artista tinerfeño complementó sus estudios en el Conservatorio Superior de Música de Canarias con clases de improvisación, jazz, armonía y guitarra moderna y clásica junto a profesores como Manolo Rodríguez, Eliseo Lloreda, Jonathan Kreisberg, Dani Pérez, Torsten de Winkel, Iván Rojas, Jordi Bonel, Lage Lund, Ricardo Gallén, David Martínez, Jilbaro Rodríguez, Roberto Limón, Gloria Medonne, Javier Riba, Laura Young, Polo Ortí o Gary Versace.
Hace ahora cinco años, Minguillón publicó su primer trabajo discográfico, Mei, en el que contó con la colaboración de músicos como Kike Perdomo, José Pedro Pérez, Audun Waage, Felu Morales y Jairo Cabrera.
En Bonobo Jazz Quartet confluyen las ideas de un grupo de músicos que han dado muestra de su pericia en clubes de los Países Bajos y Alemania. Los aficionados al jazz del continente han sido una buena piedra de toque para un cuarteto que basa su repertorio en la propia inspiración, pero que no renuncia a la interpretación de temas clásicos que, no en vano, suponen una “asignatura obligatoria” para los amantes de esta música.
Variedad estilística
“Incidiendo en la capacidad musical que tienen estos artistas, tenemos que convenir que ningún estilo escapa a las posibilidades de su ejecución”, exponen desde Tacoa. “Vamos a tener el placer de disfrutar de una buena mezcla -apuntan- que tendrá como protagonistas de lujo swing, funk, samba y, por qué no decirlo, algunas gotas de rock”.