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Diseños con sueños

Mayte y Néstor son los encargados de dar forma a los originales diseños de ropa. / DA

GABRIELA GULESSERIAN | Los Silos

Su aventura comenzó exactamente en septiembre del año pasado, y coincidió, no por casualidad, con la celebración del Festival Boreal de Los Silos, un espacio en el que se fusionan música, arte y medio ambiente y el lugar más apropiado para darla a conocer. Un año después, no esperaban conseguir tan buenos resultados. Tiendas de Madrid, Barcelona y Valencia ya han pedido sus creaciones que se conocen con la marca Uops, “una onomatopeya, algo fácil de recordar, que se suele pronunciar para decir que pasa algo”, y que se dio a conocer formalmente en septiembre del año pasado, explica Mayte Durán, que es vecina de Los Silos.

Esta joven diseñadora de modas, que actualmente vive en Las Palmas, se lanzó a crear camisetas, bolsos, riñoneras, cojines y hasta muñecos para niños basados en los dibujos que éstos realizan. Un desafío que comparte con su novio, Néstor Cano, natural de Valle Guerra y también diseñador y director de arte.

En Uops, no hay una pieza igual a la otra. Pero más allá de ser originales, sus productos llevan implícito una filosofía de vida y de trabajo acorde con la tierra que los vio nacer y a la que quieren cuidar. Por eso, apuestan por las energías renovables y se encargan de que todos los materiales y tejidos que utilizan sean ecológicos y sostenibles y procuran saber de dónde vienen y qué personas están detrás. Entre otras cosas, porque se muestran contrarios a la explotación del trabajo infantil.

Existe una gran variedad de modelos y nunca una prenda es igual a la otra. / DA

Karma interior

Bajo la premisa de que “no todos los días uno se levanta con la misma cara ni el mismo ánimo”, las creaciones de Uops tienen la particularidad de poder cambiar los ojos de los personajes, que cobran vida y adoptan “el karma interior” de quien las lleve puestas cada vez que lo desee. Por eso, además de contar con un catálogo de modelos, talles y colores, también hay uno específico de ojos: asombro, tristeza, preocupación, o sorpresa, además de aquellos propios de animales, como gato, lagarto o serpiente, son las alternativas que ofrecen.

Mayte y Néstor intentan apartarse de la tendencia de moda “consumista” para centrarse en la exclusividad, la creatividad y los gustos personales de cada persona. Por este motivo, sus diseños no están destinados a un sexo específico, cada uno puede elegir el color, la talla, el modelo y los ojos que le guste.

Su objetivo y prioridad es que sus piezas puedan ser disfrutadas durante años e incluso, se hereden de padres a hijos “y por qué no, a nietos. La idea es cogerle cariño y afecto a una prenda”, sostiene la joven diseñadora.

El hecho de que no haya una prenda igual a la otra les dificulta su inserción en el mercado, dado que las tiendas están acostumbradas a comprar productos seriados cuyo coste es más bajo y por lo tanto, su beneficio es mayor. Y aunque las diferentes redes sociales son una buena alternativa, admiten que la situación actual “está un poco complicada”. No obstante, no se rinden y miran con optimismo y perspectiva al futuro.

Ellos tienen la esperanza de que su forma de trabajar y de querer un mundo más justo para todos llegue a ser, algún día, la de la mayoría. De momento no se quejan y siguen adelante, “soñando con lo que hacen y diseñando lo que sueñan”.