NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife
El proyecto más inmediato que afronta el Mercado Nuestra Señora de África pasa por la remodelación de su exteriores, una obra cuyo presupuesto está en torno a los 100.000 euros y que busca unificar la imagen de los bares y dotarlos de terrazas que hagan más atractiva su visita. Una de las revindicaciones que La Recova hace al Ayuntamiento, además de pedirle ayuda para financiar el proyecto, es que le ceda la tasa por ocupación de suelo público que implica la instalación de las terrazas. “A cambio, nosotros nos haríamos cargo de todo el mantenimiento de estas, desde la limpieza del espacio que invadan hasta incluso de las jardineras que acompañen a las mesas y sillas que se instalen”, explicaba ayer la presidenta de la Cooperativa del Mercado Nuestra Señora de África, Estefanía Hernández, durante la visita que el primer teniente de alcalde, Julio Pérez, hizo al recinto para conocer de primera mano las demandas de los 300 empresarios que ocupan en estos momentos los puestos del tradicional espacio. Pérez dijo desconocer la petición hecha por Hernández, quien dijo que se la ha hecho llegar al Ayuntamiento en más de una ocasión y aun siguen a la espera de una respuesta.
Innovación
El primer teniente de alcalde dijo no ser ajeno al devenir del Mercado Nuestra Señora de África, del que es usuario habitual. Pérez destacó la capacidad del mercado para innovar “incorporando nuevos productos, mejorando la presentación de estos y apostando por proyectos novedosos”.
El también consejero delegado de la Sociedad de Desarrollo coincidió con la presidenta del mercado en que el exterior de La Recova es el que necesita adecuarse a la imagen real del mercado. “Estamos estudiando cómo buscar el dinero juntando subvenciones de distintos sitios”, aseguró y añadió que el mercado santacrucero “no sólo es un servicio sino también un atractivo para la ciudad y sus visitantes”, una especie de bisagra entre el norte y el sur del barranco que atraviesa la ciudad.
Lista de espera
“Ningún puesto ha cerrado por fracaso”, decía ayer orgullosa Estefanía Hernández, en referencia a la buena salud de La Recova. Según la presidenta de la cooperativa, en la actualidad existe una lista de espera para ocupar un puesto formada por una veintena de personas. “El ritmo en el que se van ocupando depende de los puestos que vayan quedando vacíos y desde hace años no tenemos ninguno que se quede sin ocupar”. Hernández apuesta por que las nuevas ofertas sean novedosas.