EFE | Santa Cruz

El nadador catalán Miquel Suñer, especialista no profesional en cubrir largas distancias en aguas abiertas, ha abandonado definitivamente hoy su intento de cruzar de Tenerife a La Gomera a apenas siete kilómetros de conseguirlo porque llegó un momento en que le faltaba el aire.

Miquel Suñer, de 35 años de edad, originario de Girona e ingeniero en la empresa Endesa, practica deporte en tiempo de ocio.

Suñer ha relatado a Efe que, cuando le quedaba menos de la cuarta parte de los 30 kilómetros de este “complicado canal”, observó que “no respiraba libremente”, por lo que los integrantes del equipo que le han acompañado adoptaron la “difícil decisión” de desistir.

“A una o dos horas del final me he dado cuenta que no respiraba como siempre y el frío del agua se te va apoderando. Llegué a un punto que ya no tenía aire. Quería continuar nadando a braza, sin meter la cabeza, pero hemos visto que lo mejor era abortar la prueba, dar prioridad a la seguridad”, ha agregado.

Después de someterse a un tratamiento inicial de “emergencia” en el barco que utilizaba para seguimiento logístico, el nadador gerundense visitará un centro médico para que lo mire “bien”, porque se encuentra “cansado” y con el pecho “muy cargado”.

Miquel Suñer encaró la prueba en aguas canarias como un “test”, porque le “servía mucho” para afrontar otra de similares características el próximo verano, la del Canal de Catalina, ubicado en California (Estados Unidos).