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Anticorrupción > Francisco Pomares

Parece que las chapucerías del Paulinato no se limitan a colocar a un tío en una lista sin pedirle siquiera permiso, y hacer que lo voten los compromisarios. Ya saben que algunos afiliados de Coalición se plantean impugnar la elección de la plancha de Rivero en base a ese asunto. Pero hay chapucerías peligrosas: la Fiscalía Anticorrupción de Tenerife ha presentado una denuncia contra la Mesa de Contratación del Gobierno de Canarias que adjudicó hace un año las licencias de radio, en un proceso tan irregular que no lo han defendido ni siquiera los más próximos a Rivero, como su fiel José Luis Perestelo, y que provocó que el propio PSOE -que apoya sin fisuras a Rivero en el Gobierno- se ausentara del Consejo que aprobó las adjudicaciones.

Según el texto de la denuncia, la Mesa abrió las ofertas presentadas en enero de 2011, y en abril, con las ofertas ya conocidas y procesadas, aprobó nuevos criterios para valorar los proyectos. Además, la Fiscalía dispone de documentación aportada por la empresa editora del periódico El Día, que pretende probar que alguna de las ofertas que resultaron adjudicatarias fueron creadas y entregadas después de la apertura de los sobres, adaptándose por tanto a los nuevos criterios. En cristiano, lo que la Fiscalía dice es que estaríamos ante una adjudicación dirigida por el Gobierno para favorecer a los medios más serviles, como muchos hemos venido denunciando desde hace meses. A juicio de la Fiscalía, los hechos podrían implicar delitos de prevaricación, tráfico de influencias, y cohecho, por lo que se ha citado a declarar a todos los miembros de la Mesa: a su presidente, Fernando Ríos, hombre de absoluta confianza de Rivero; al responsable de medios de la propia Presidencia del Gobierno, Manuel Martín Almeida, y a los técnicos implicados. También se ha citado al constructor Miguel Concepción, un personaje mucho más conocido: adjudicatario recurrente de obra pública en los últimos veinte años, presidente del CD Tenerife por encargo de Rivero, del que es más que amigo, e implicado recientemente en el caso de fraude de Islas Airways, una presunta apropiación irregular de cuatro millones de euros de los certificados de residencia, una broma que ha provocado que a partir de ahora todos los canarios que quieran viajar tengan que llevar su certificado de residencia encima. El constructor amigo de Rivero resultó sorprendentemente adjudicatario de 17 licencias de radio. Concepción y el también constructor Jaime Cortezo, fueron los más favorecidos por la adjudicación de licencias. Ahora negocian ambos alquilar bajo cuerda a los que no recibieron ninguna…